Entraba dentro de las previsiones del presidente de la Generalitat de Cataluña, José Montilla. La salida del Gobierno autonómico como consejero de Gobernación del secretario general de Esquerra Republicana (ERC), Joan Puigcercós, para centrarse en exclusiva en el partido, era una posibilidad que Montilla vislumbraba, aunque los hechos se han precipitado.

Los malos resultados obtenidos por ERC en las elecciones generales del domingo y la convicción de Puigcercós de que debe tomar cuanto antes el liderazgo del partido, provocaron ayer su salida del Ejecutivo. Puigcercós le comunicó a Montilla su decisión a primera hora de la mañana de ayer. Y el president la trasladó a la dirección del PSC. Pero Montilla redujo la crisis del Gobierno catalán a ese cambio concreto al frente de Gobernación, y hoy mismo nombrará como sustituto de Puigcercós al también republicano Jordi Ausàs, alcalde de la Seu d´Urgell (Lleida). "No es una crisis de Govern, es un cambio en el Govern", precisó el entorno del president .

Pero la primera crisis del segundo tripartito, que preside Montilla, recordó al Gobierno del expresident Pasqual Maragall. Montilla exigió a Puigcercós un perfil concreto para sustituirle al frente de la cartera de Gobernació: que tuviera experiencia de gestión y que fuera un buen conocedor del mundo local. Ausàs reunía esas características, pero no fue el primer nombre que decidió ERC. El primer nombre fue el de Jaume Oliveras, actual secretario general de Gobernación, y un hombre de confianza de Joan Puigcercós. Pero no logró el apoyo del otro pilar de ERC, Josep Lluís Carod-Rovira. El argumento de Carod fue que, en plena batalla por el poder, no podía admitir a alguien tan ligado a Puigcercós como Oliveras. Y Carod sugirió a Jordi Portabella, concejal en el Ayuntamiento de Barcelona. Pero este recibió el veto de Joan Puigcercós. Ante ese choque de trenes, Carod y Puigcercós acordaron el nombre de Ausàs. El gran problema y que recordó, efectivamente, al anterior Gobierno tripartito de Maragall, es que Montilla no lo conoció de primera mano, hasta el punto de considerar "un desprecio inaceptable a la institución" la actitud de ERC. Según el pacto que firmaron las tres fuerzas políticas del Gobierno catalán, le correspondía a ERC proponer al sustituto de un consejero de su partido, y al president aceptarlo o no en última instancia. Puigcercós se reunió con Montilla a media tarde para comunicarle quien sería su sustituto, pero el nombre ya se conocía.

CRISIS ANTERIORES La de ayer es la primera crisis de gobierno de Montilla. Pero el tripartito sufrió ya en época de Maragall. Cuando solo llevaba un mes, el tripartito vivió su primera crisis a raíz de la reunión de Carod con ETA en Perpiñán. Maragall le retiró sus competencias pero le mantuvo como consejero sin cartera, aunque Carod renunció al puesto. En octubre del 2005, Maragall intentó remodelar el Gabinete, pero no pudo por la oposición de ERC e ICV. El 11 de mayo, tras el rechazo de ERC al Estatuto, Maragall expulsó a los republicanos del Ejecutivo y convocó elecciones anticipadas.