La primera votación fallida de la investidura de Mariano Rajoy dejó en el aire la sensación de que el bloqueo continuará y España se encamina sin remedio a una nueva convocatoria electoral. El discurso de Pedro Sánchez contra el presidente en funciones fue tan duro que el secretario general del PSOE cerró cualquier resquicio a un posible cambio de posición, ya sea en la segunda votación que tendrá lugar este viernes, en la que solo se requiere mayoría simple, ya sea en los dos meses que ya han empezado a correr hasta la nueva llamada a las urnas.

En este escenario, hay pocas posibilidades de que el país no sea consultado de nuevo, y el 25 de diciembre. Una de ellas, que el PSOE, a cambio de su abstención, acabe pidiendo la cabeza de Rajoy, en quien Sánchez focalizó su rechazo. Sin embargo, este jueves, el portavoz socialista en el Congreso, Antonio Hernando, una de las personas del núcleo de confianza del secretario general, dejó claro que tiene que ser el PP el que decida quien le representa, cerrando por tanto la puerta a que su partido vaya a dar el paso de pedir laretirada del jefe del Ejecutivo en funciones. Y, en el remoto caso de que el PP releve a su candidato, Hernando ha advertido que tampoco se desbloqueará la situación, porque el PSOE rechaza a Rajoy, pero también a las políticas conservadoras de su partido.

Aún así, el socialista, en una entrevista en RNE, ha considerado que tras la previsible investidura fallida del viernes, continuará siendo "el tiempo de Mariano Rajoy", quien ha manifestado ya su deseo de seguir intentando seducir al PSOE u otros partidos y, en este caso, presentarse a una nueva investidura.

LAS DIFICULTADES DE LA VÍA ALTERNATIVA

Hernando ha enfriado además la posibilidad de que Sánchez intente encabezar un gobierno progresista de la mano de Podemos y los partidos nacionalistas o Ciudadanos. "Los números no dan", ha aseverado, además de recordar que en la legislatura fallida ya intentaron hasta el último aliento buscar una alianza con el partido morado y C's que tampoco fue posible. Sánchez en su discurso del miércoles no despejó, no obstante, ninguna incógnita de que cómo prevé mantener a la vez su rechazo a Rajoy y a las terceras elecciones.

Hasta pasadas las elecciones vascas y gallegas del 25 de septiembre no habrá, previsiblemente, nuevos movimientos. En este sentido, Hernando ha manifestado que está "convencido" de que se convocará en los próximos dos meses una nueva reunión del Comité Federaldel PSOE, pero el máximo órgano entre congresos no cambiará de posición.

"No veo que mayoritariamente los dirigentes del PSOE vayan a permitir que el hombre de los SMS a Bárcenas siga siendo el presidente del Gobierno", ha aseverado.