El martes triunfará esa idea tan cristiana de que no hay satisfacción sin sufrimiento. Tras vivir cinco años en el ostracismo al que le sometió George W. Bush, José Luis Rodríguez Zapatero tendrá su particular escena de la chimenea en el Despacho Oval. El Premio Nobel de la Paz y presidente de EEUU, Barack Obama, le recibirá a media mañana (por la tarde, en España) para mantener su primera reunión bilateral. El orden del día incluye la presidencia española de la UE, el cierre de Guantánamo y la colaboración de ambos países en Afganistán, el conflicto de Oriente Próximo y América Latina.

El jefe del Ejecutivo volará a EEUU tras los actos del Doce de Octubre. El lunes dormirá en la Blair House, la residencia oficial de los invitados del presidente norteamericano, a media calle de la Casa Blanca. Zapatero le obsequiará de entrada con su apoyo a la clausura de Guantánamo y el anuncio de que España está dispuesta a acoger a algunos reos. El Gobierno afirma que "no serán más de tres". Por ahora. Fuentes de Exteriores apuntan que el esfuerzo "puede ser mayor en los próximos meses".

PLANES AMBICIOSOS La baraka de Zapatero le ha acompañado esta vez. Si no hay cambios de última hora, será el primer mandatario en reunirse con el flamante Nobel de la Paz. Zapatero ve en el galardón un "respaldo" a los planes de Obama, como lograr un mundo libre de armas nucleares y acabar con el unilateralismo que Bush impuso.

El jefe del Ejecutivo español explicará en la reunión sus prioridades durante la presidencia de la UE y el deseo del Gobierno de renovar la Agenda Transatlántica. Mientras la actual presidencia sueca aspira este semestre a establecer un Consejo de Consultas Políticas consolidado, Zapatero espera reforzar la cooperación en Justicia e Interior (política antiterrorista y detenciones).

Está previsto que los dos líderes analicen la misión en Afganistán, en la que España participa con cerca de 1.000 soldados, tras el compromiso de enviar a casi 300 más. Zapatero defenderá que "la solución no puede ser solo militar", un punto de vista asumido ya por la Administración de EEUU. Fuentes de la Moncloa aseguran que "escuchará" el análisis de Obama, pero no ofrecerá más tropas porque "el esfuerzo ya está hecho".

Ambos mandatarios abordarán el conflicto de Oriente Próximo, donde los más optimistas han detectado la posibilidad de que renazca el proceso de paz. Según fuentes gubernamentales, el líder español "apoya decididamente" las gestiones de Obama y aplaude que se haya involucrado desde el inicio de su mandato, al contrario que Bush y Bill Clinton, que relegaron los esfuerzos a la segunda legislatura. El dosier tendrá gran relevancia, pues, desde Washington, Zapatero volará a Damasco (Siria) para iniciar su primera gira por Oriente Próximo (Israel, los territorios palestinos y el Líbano).

COOPERACION Zapatero se ofrecerá a cooperar con EEUU en América Latina. Respecto a Cuba, explicará que hace tres años "abrió canales fluidos de diálogo" con las autoridades de la isla, pero aún no han dado fruto. El ministro de Exteriores, Miguel Angel Moratinos, que estará presente en la reunión plenaria, avanzará a las autoridades estadounidenses los objetivos de la visita que hará a Cuba el sábado.

En la agenda propiamente bilateral, Zapatero recordará el liderazgo de las empresas españolas en alta velocidad y energías renovables, sectores por los que ya se han interesado las autoridades estadounidenses.