El obispo auxiliar de Barcelona, Joan Carrera, afirmó ayer que cuestiones como la de la unidad de España "no pertenecen ni a la fe ni a la moral". Carrera respondía con estas palabras a la demanda que el arzobispo de Toledo, Antonio Cañizares, elevó a la Conferencia Episcopal Española para que se pronunciara sobre esta cuestión. Cañizares dijo que la unidad de España constituye "no tan sólo un problema político, sino que también es un problema moral muy importante".