Las dos bombas de ayer en Baiona y Sanxenxo son el noveno ataque de ETA en Galicia. Tres de esos atentados se cometieron también un 21 de agosto. Fue en 1996. Los violentos eligieron también entonces Baiona para colocar uno de los tres artefactos, que fue desarticulado por la policía, al igual que los otros dos que habían colocado en Santiago de Compostela. Ninguno de los ataques provocó víctimas mortales.

Galicia es una de las autonomías que menos actividad terrorista etarra ha sufrido. A ello contribuyeron las fuerzas de seguridad, ya que en 1996 y en el 2000 la Guardia Civil desmanteló los dos comandos de ETA que se habían instalado en la región antes de que cometieran un solo atentado.