El juez de la Audiencia Nacional Juan del Olmo ha traspasado hoy a Baltasar Garzón la investigación sobre la infraestructura de los terroristas detenidos en Francia Kepa Suárez y Jon Iurrebaso, este último supuesto negociador de ETA con el Gobierno.

El titular del Juzgado Central de Instrucción número 6 de la Audiencia Nacional se ha inhibido en favor de Garzón en el caso concreto de estas diligencias que abrió Del Olmo después de recibir la información de la juez francesa Laurence Le Vert referida a delitos cometidos en España de falsificación de placas de matrícula y de documentos, así como el robo de vehículos.

Del Olmo, según fuentes jurídicas, ha considerado que es "ahora" cuando el Juzgado Central de Instrucción número 5, cuyo responsable es Garzón, ha justificado con un "dato cierto" -en concreto, un número de teléfono- que la investigación de estos hechos le corresponde a él por antecedente, puesto que la inició en abril de 2007.

De esta manera, el magistrado ha afirmado que se "justifica plenamente" la competencia de Garzón en el marco de la instrucción "por colaboración con organización terrorista".

La respuesta de Del Olmo se produce un día después de que Garzón ampliara con "razonamientos objetivos" el por qué le correspondía a su juzgado la investigación de esos delitos, que no tienen que ver con la comisión rogatoria enviada por la jueza Le Vert a la Audiencia Nacional sobre el supuesto negociador de ETA y que Garzón reclamó también como suya.

Para ello, argumentó que tenía procesado y con una orden de busca y captura a Kepa Suárez, al que acusa de pertenecer al aparato de captación de ETA.

Sin embargo, Del Olmo rechazó en dos ocasiones traspasarle la investigación porque ésta le había correspondido por reparto y, de hecho, el Pleno de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional acordó ayer por unanimidad dejar sin efecto la cuestión de competencia planteada por Baltasar Garzón.

Los dos presuntos terroristas fueron detenidos el pasado 29 de marzo en el suroeste de Francia y en el momento del arresto, Iurrebaso se identificó como negociador de la banda armada con el Gobierno, extremo que es el que investiga la jueza gala.

Entre la documentación que se les incautó figuraban informaciones sobre supuestas conversaciones del Gobierno con ETA y varios números de teléfono correspondientes a abonados españoles y franceses, uno de los cuales, según el semanario galo "L'Express", era el del jefe de la Policía antidisturbios gala, Christian Lambert, nuevo director de gabinete del prefecto de Policía de París.