La oposición se ha rebelado este lunes contra el compromiso deMariano Rajoy con el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, a adoptar "nuevas medidas en la segunda mitad del año" para corregir el desvío en 8.000 millones de euros en el objetivo de déficit público. Esto supondrá, a la práctica, nuevos recortes en unos servicios públicos ya muy esquilmados o biensubidas de impuestos, un escenario que rechazan los que podrían ser sus socios en un futuro gobierno si, como dicen algunos sondeos,PP y Ciudadanos obtienen mayoría absoluta en las elecciones generales del 26-J. En todo caso, los partidos reprochan que Rajoy traslade a Juncker este compromiso sin detallar ni pactar con el resto de fuerzas las medidas a poco más de un mes de que se celebren los comicios.

El primero en reaccionar ha sido el secretario general y candidato delPSOE a la presidencia del Gobierno, Pedro Sánchez, que tenía un desayuno informativo a primera hora de la mañana. Sánchez ha exigido a Rajoy que detalle "qué recortes quiere hacer" porque "los españoles tienen derecho a saberlo", informa Juan Ruiz. A juicio del dirigente socialista, el presidente del Gobierno "miente sin pudor" y está haciendo lo mismo que en el 2011, cuando en la campaña de las elecciones que se celebraron aquel año prometió que bajaría impuestos y no tocaría el Estado del bienestar, algo que no cumplió.

El presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, ha considerado que el jefe del Ejecutivo en funciones no puede llegar a este acuerdo con Bruselas "cuando los españoles aún tienen que ir a votar y no sabe si va a gobernar, con qué condiciones y con qué mayorías". De hecho, Rivera ha rechazado de plano subidas de impuestos y ha advertido que ya no se pueden hacer recortes en ámbitos como la educación y la sanidad. Así, el líder del partido naranja ha abogado por un acuerdo entre los grandes partidos para conseguir que Bruselas se avenga a aumentar a dos años el plazo para "flexibilizar el déficit".

"INTERMEDIARIO COLONIAL"

En Podemos, las primeras reacciones han llegado vía Twitter. La exdiputada Irene Montero ha acusado al PP de vender los derechos de los españoles "a quienes no no se presentan a las elecciones", en alusión a las autoridades de Bruselas, y el número dos del partido morado, Íñigo Errejón, ha calificado de "conducta de intermediario colonial" que Rajoy diga en España que se han acabado los recortes y prometa a Bruselas hacer más ajustes si gana.

También los sindicatos han afeado al presidente del Gobierno este compromiso 'secreto'. El secretario general de CCOO, Ignacio Fernández Toxo, ha reclamado a Rajoy que comparezca ante la Diputación Permanente del Congreso para aclarar en qué consiste este compromiso. "Este tipo de cartas no pueden ser secretars porque pueden afectar mucho a la vida del país y al conjunto de la ciudadanía", ha añadido.