Los ministros de Defensa de los países miembros de la OTAN discutirán mañana el recorte de cuarteles principales de la organización, una cuestión que puede suponer el cierre del de Retamares (Madrid). La Alianza tiene once cuarteles de ese tipo, que pasarían a ser siete en el proyecto de reforma de la estructura militar, que busca una organización más ligera y barata. El secretario general de la Alianza, Anders Fogh Rasmussen, dijo este lunes que presentará a los ministros una propuesta detallada, sobre la que aseguró que espera "lograr un consenso". "Soy optimista de que podamos alcanzar un acuerdo durante la reunión de ministros de Defensa", afirmó el danés Rasmussen en una conferencia de prensa. Uno de los once cuarteles de la OTAN está en Retamares (Madrid), donde está el Mando del Componente Terrestre para el sur de Europa, en el que trabajan algo más de 400 personas, mientras que otro de los amenazados es el de Heidelberg (Alemania), que alberga el Mando del Componente Terrestre para el norte. "En principio, lo dos desaparecen", señalaron fuentes militares que pidieron el anonimato. Rasmussen basó su optimismo en que la cumbre de la OTAN de Lisboa de noviembre pasado acordó el marco y el alcance del recorte -aunque sin decidir dónde tendrían lugar los cierres- Sin embargo, diplomáticos de varios países aliados mostraron más cautela sobre las posibilidades de éxito de la propuesta del secretario general. "No sabemos si habrá una decisión en los recortes", señaló un funcionario estadounidense. "El tema está muy verde. No está claro que se vaya a aprobar", apuntó por su parte un diplomático europeo. La ministra española, Carme Chacón, ha propuesto a Rasmussen albergar un Centro de Operaciones Aéreas combinado, que garantizaría el control del espacio aéreo español y dotaría a los aliados de capacidad de mando y control en el sur de Europa. Según el Ministerio español de Defensa, la nueva estructura debe tener en cuenta de forma importante el flanco sur del Mediterráneo, y también el peso de España, que es el séptimo contribuyente al presupuesto de la organización atlántica y el quinto en aportación a las operaciones militares. Los ministros discutirán también sobre el proceso de recorte de agencias de la OTAN, ya aprobado en Lisboa y que pasarían de 14 a tres. La fuente europea apuntó que los ahorros que se están contabilizando en este capítulo "no son los que se esperaban", por lo que el proceso "sólo se salvará" si se consigue una gestión más racional de las agencias refundidas. Además de la reestructuración interna, los ministros de Defensa hablarán mañana sobre Libia, y el secretario general volverá con su petición de que los países envíen más medios y permitan un uso más flexible de los ya empleados. La OTAN considera que al régimen de Muamar al Gadafi le queda ya poco tiempo, por lo que la discusión de mañana se centrará en la preparación de la era pos-Gadafi. La Alianza cree que tras la caída del actual régimen no debe tener un papel importante en Libia, únicamente si se lo piden las nuevas autoridades y circunscrito a la constitución de unas fuerzas armadas democráticas. Esta reunión ministerial marcará también la despedida del estadounidense Robert Gates, quien dejará el cargo próximamente tras cuatro años y medio al frente del Pentágono, primero con el presidente George W. Bush y después con Barack Obama.