Parece que se acabó. La triple cita de ayer con las urnas en las elecciones municipales, autonómicas y europeas (o hasta cuádruple en el caso de las entidades locales menores, que también elegían a sus juntas vecinales) cerró el periplo electoral en Extremadura con una jornada de calor en la que había ayer 905.250 extremeños llamados a votar en las 1.411 mesas instaladas en 794 colegios electorales. La afluencia fue menor que en el 28A (las elecciones generales) y con pocos incidentes; lo más destacado, que dos colegios electorales en Fuenlabrada de los Montes y Hoyos tuvieron que retrasar media hora cierre de las votaciones (cerraron a las 20.30 horas y no a las 20.00, como el resto), porque distintos problemas habían retrasado en ambos el inicio de las votaciones por la mañana. En el caso de Fuenlabrada de las Montes, no se pudieron depositar los primeros votos hasta las nueve y media de la mañana porque faltaban papeletas de Unidas por Extremadura. En Hoyos, tampoco se pudieron iniciar a las nueve de la mañana las votaciones porque faltaba un acta de escrutinio. Aunque ese documento no era necesario para la constitución de la mesa, el presidente decidió retrasar la apertura del colegio hasta que estuviera el documento. Junto a eso, en un local electoral de Hervás se había bloqueado la cerradura de acceso, aunque el incidente pudo solventarse rápidamente e iniciar a tiempo la jornada de votaciones.

Junto a esas vicisitudes propias de una cita electoral, también se registraron en varios colegios algunos problemas de salud; el más grave, el infarto que sufrió una mujer de 86 años cuando se disponía a votar en el colegio del hogar de mayores de la calle Calvario y que falleció por la tarde en el Hospital de Mérida, según confirmó a este diario el Servicio Extremeño de Salud. La mujer fue asistida inicialmente por los miembros de la mesa, que se llevaron «un gran susto» por la gravedad de la situación. Según explicó a este diario el presidente, Jesús Tomás Barrena, la mujer se acercó pasada la media mañana al colegio electoral. Ya llegó «muy sofocada» y se optó por sacar las urnas a la calle para que pudiera ejercer el derecho al voto. Pero tras depositar su papeleta su estado de salud empeoró y finalmente vecinos y miembros de la mesa le ayudaron a entrar en el colegio a la espera de la llegada de los servicios de emergencia, que la trasladaron al Hospital de Mérida, al que llegó en estado muy grave y fue ingresada en la UCI, donde finalmente falleció. Más allá de ese caso, la jornada transcurrió con absoluta normalidad, informa Rocío Entonado.

Problemas de salud

Además se registraron otros problemas de salud en la constitución de las mesas en distintos colegios. En Montijo, por ejemplo, un hombre fue derivado al Hospital Universitario de Badajoz por lo que inicialmente se pensó que era un ictus, aunque tras ser atendido allí por los médicos se comprobó que se trataba de una lipotimia y fue dado de alta a las pocas horas. Además, un representante de la administración sufrió un ataque de epilepsia y tuvo que ser sustituido en una mesa electoral; y en otro caso, un integrante de una mesa no pudo ocupar su puesto por una lumbalgia, según informó la Delegación del Gobierno.

La jornada fue de absoluta normalidad en Badajoz. Las 194 mesas repartidas en 64 colegios electorales se constituyeron sin problema y solo se formaron colas en algunos de ellos a primera hora de la mañana y poco antes del cierre. Muchos pacenses decidieron ejercer su derecho al voto antes de dedicar el domingo a descansar, pasar el día en el campo o disfrutar de una terraza para combatir las elevadas temperaturas. Otros, por contra, apuraron hasta última hora para depositar sus papeletas en las urnas y minutos antes de las ocho de la tarde el ambiente en los colegios electorales se recuperaba . La opinión generalizada entre apoderados, interventores y miembros de las mesas era que durante la jornada habían percibido menos movimiento que en las generales del pasado 28 de abril, informa Belén Castaño.

En Cáceres, la fiesta de la democracia compartió protagonismo con el primer fin de semana de feria en la ciudad, en una jornada electoral marcada por la ausencia de incidentes. Con una estampa similar a la de las generales, los cacereños acudieron a las urnas desde primera hora de la mañana. Del mismo modo que la de hace un mes, estuvo caracterizada por la ausencia de incidencias relevantes salvo alguno relacionado con las papeletas que denunció Unidas Podemos en el hotel Extremadura y algún momento curioso que se repitió en varios colegios de la ciudad debido a la confusión que generó para algunos ciudadanos la cantidad de urnas y el destino de las papeletas. Cierto es que aunque el goteo de votantes fue constante hasta que se cerraron las urnas, no se produjeron las esperas de los comicios de abril.

Voto y feria

En Cáceres, el momento de mayor afluencia arrancó pasadas las 12 de la mañana. La coincidencia de los comicios con la celebración de la preferia y el concurso de saltos en el recinto Hípico condicionó que el grueso de votantes se concentrara en esa franja horaria para compatibilizar el deber ciudadano con el tiempo de ocio en el ferial. Precisamente, uno de los retratos más llamativos de la jornada de ayer lo protagonizaron los vendedores ambulantes de la feria caracterizados con disfraces que se repartían en el centro al paso de los votantes, informa Gema Guerra.

Además en Malpartida de Cáceres, los apoderados de Ciudadanos, PP y Unidas por Malpartida presentaron una incidencia ante la mesa electoral por «manipulación de votos», después de que un apoderado del PSOE cambiara, presuntamente, la papeleta de un elector que quería votar a Vox, por una de su partido. El incidente se registró entre las 14.30 y 15.00 horas en una mesa de la casa de cultura de la localidad. Según relataron a este diario fuentes conocedoras de estos hechos, un elector de mediana edad solicitó ayuda para introducir su papeleta en los sobres de las elecciones europeas, autonómicas y municipales a un apoderado del PSOE y le manifestó que quería votar a Vox. Antes de depositar el voto en las urnas, un apoderado de Cs se percató que la papeleta que se había introducido en el sobre no coincidía con la decisión del votante y entonces avisó a la presidencia de la mesa electoral, según explicó. Al preguntar al votante sobre su elección, y tras manifestar este que quería votar a Vox, la mesa abrió el sobre de las elecciones a la Asamblea de Extremadura, en la que había una papeleta del PSOE, por lo que el voto no llegó a depositarse en las urnas. La Policía Local se desplazó hasta el lugar. Finalmente PP, Cs y Unidas por Extremadura presentaron una reclamación ante la mesa que (según confirmaron fuentes del PP y de Cs) prevén elevar después a una denuncia, informa Celia Gálvez.

También en Plasencia, la de ayer fue una jornada electoral tranquila y con invitaciones a la participación por parte de los candidatos a la alcaldía. Con 33.028 electores censados, 13 colegios y 43 mesas electorales, estas se constituyeron con normalidad, con la salvedad de que en varios casos, los titulares no se presentaron a sus puestos y tuvieron que ocupar su lugar los designados como suplentes. La anécdota la puso una reclamación de PSOE y Unidas Podemos ante la junta electoral porque una apoderada del PP estaba «dando sobres en la puerta» del colegio de la biblioteca municipal. Los usuarios de Placeat ejemplificaron además las primeras elecciones municipales en las que las personas con discapacidad intelectual tienen derecho a voto, informa Raquel Rodríguez.

Reclamaciones

También dominó la normalidad en el caso de Don Benito y Villanueva de la Serena, con excepción de dos reclamaciones hechas en esta localidad por Vox y Compromiso con Villanueva ante la junta electoral de zona. En ambas reclamaciones había un hecho coincidente, que era el supuesto reparto de papeletas del PSOE por parte de dos apoderados socialistas en las cercanías del colegio público El Cristo. Asimismo indicaban que en varios colegios electorales no se garantizaba la privacidad del voto y se apartaban tacos de papeletas de Compromiso con Villanueva, Partido Popular y Ciudadanos. En el caso de la reclamación presentada por Vox, esta formación iba más allá quejándose de la existencia de una cámara de seguridad en el techo, justo encima de una de las cabinas de votación, informa Raúl Haba.

En Almendralejo tampoco se registró ninguna incidencia en esta jornada de votaciones, más allá del momento de desconcierto que se vivió en el colegio Ortega y Gasset porque las papeletas azules para las elecciones europeas no cabían en la sala del voto secreto y algunos ciudadanos decían que no se garantizaba de ese modo este derecho. La solución que se ofreció a estas personas fue que se llevaran a este habitáculo una papeleta de cada una de las opciones y desecharan las no elegidas, informa Rodrigo Morán.