La policía francesa detuvo el lunes a Aitor Zubillaga, huido desde el 2001 para eludir un juicio por kale borroka . El presunto etarra fue reconocido en su momento por un taxista de Castellón como la persona que se despidió de Ander Mugika el 19 de julio del 2007 en la estación de Renfe antes de subir este último al vehículo. Mugika abandonó después el taxi al detectar un control de la policía y dejó en el interior una bolsa cargada de material explosivo.

La Audiencia Nacional ya ordenó la busca y captura de Zubillaga en el 2001, después de que se fugara, tras haber sido procesado por violencia callejera. Un año antes, había sido detenido por orden del juez Juan del Olmo, que le dejó en libertad bajo fianza de 15.000 euros.

Zubillaga tenía pendiente una euroorden por los delitos de "actos de terrorismo, daños y posesión de explosivos" por haber provocado el incendio de un coche y de la casa de un concejal del PNV en San Sebastián.

El detenido, de 30 años, vivía desde hacía varios años en la localidad de Gotein-Libarrenx (Francia) y fue detenido ante la vivienda de su compañera, ya que no residía en la clandestinidad. Mugika está vinculado con la explosión en el 2007 de un coche en Ayamonte (Huelva) y de una caravana que saltó por los aires en Castellón tras sospechar los etarras que habían sido descubiertos por la Guardia Civil. La fiscalía de Pau notificó ayer al etarra la orden de detención dictada por la Audiencia.

Por otra parte, el juez Fernando Andreu confirmó ayer el ingreso en prisión de Zigor Goikoetxea, hermano de un jefe del complejo Vizcaya , después de que la edila del PP en Getxo Marisa Arrue ratificase que le amenazó de muerte el 10 de agosto.