El Parlamento vasco ha dado hoy el primer paso para derogar la ley que establece el 25 de octubre, aniversario de la aprobación del Estatuto de Autonomía, como Día de Euskadi, una festividad establecida la pasada legislatura cuando la izquierda abertzale no estaba presente en la Cámara.

PNV y EH Bildu han votado a favor de la toma en consideración de la proposición de ley del primer grupo, que propone la derogación de la ley aprobada el 22 de abril de 2010, cuando presidía el Gobierno vasco por primera vez un socialista, Patxi López.

Ahora, esta propuesta seguirá la tramitación habitual de una ley, en comisión y ponencia, en su caso, pero por la brevedad del texto se prevé muy rápida.

La proposición no establece una fecha alternativa a esta festividad, por lo que si finalmente sale adelante como es previsible al contar con el apoyo mayoritario de PNV y EH Bildu, el Gobierno vasco eliminaría el 25 de octubre como festividad en 2014 y fijaría un festivo adicional aún por determinar.

PSE-EE, PP y UPyD, los mismos grupos que hace tres años aprobaron el establecimiento por primera vez de la festividad de la Comunidad Autónoma Vasca, han votado en contra de tramitar esta iniciativa.

EH Bildu ha propuesto sustituir la actual festividad autonómica por el 3 de diciembre, Día Internacional del Euskera, moción que ha sido rechazada por los votos del PSE-EE, PP y UPyD y la abstención del PNV.

Aunque este último grupo por ahora no propone una fecha alternativa, recientemente el lehendakari, Iñigo Urkullu, habló de la posibilidad de que la festividad autonómica se fije en el 7 de octubre, fecha en que se constituyó el primer Ejecutivo vasco de José Antonio Aguirre en 1936.

Durante el debate, los portavoces del PNV, Joseba Egibar, y de EH Bildu, Pello Urizar, han coincidido en que con esta futura ley se pone fin a una "imposición".

José Antonio Pastor (PSE-EE) ha criticado por contra que los grupos nacionalistas quieran "acabar con el Día de Euskadi para volver al día de la marmota, con los viejos debates identitarios", mientras que Borja Sémper (PP) ha sido muy crítico con el PNV, partido que, según ha dicho, es el que "más ha disfrutado del régimen de libertades" instaurado por el Estatuto y la Constitución y el que ahora "más deslealtad demuestra a la palabra dada".

Gorka Maneiro (UPyD) también ha criticado la "lucha fratricida" entre los que "quieren la independencia hoy", en referencia EH Bildu, y los que la quieren mañana, el PNV.