La tregua de ETA favoreció que la izquierda aberzale obtuviera unos resultados espectaculares en las elecciones municipales de 1999. En la comunidad autónoma vasca rompió el techo y se situó, con el 19,6% de los votos, como segunda fuerza en número de concejales tras la coalición PNV-EA. En Navarra se convirtió en tercera fuerza del Parlamento foral, por detrás de UPN y PSN, con el 15,9% de los votos.

EH declinó con la vuelta de la banda terrorista ETA a las armas. Para las generales del año 2000 pidió la abstención y en las autonómicas del 2001 perdió la mitad de su representación. Se auguró que en las municipales el varapalo sería mayor, porque buena parte de los candidatos que se presentaron en 1999 querían desertar de las listas. AuB concluye hoy la recogida de las 50.000 firmas que necesitan para mantener la expresión electoral de la izquierda aberzale.