En el País Vasco, aparte de quién será el nuevo lendakari, preocupa, y mucho, quién ocupará la cartera del Interior y, por tanto, dirigirá a la Ertzaintza en la lucha contra ETA. Si el PSE logra conformar un Gobierno en solitario, Patxi López ha pensado que ocupe este relevante cargo el secretario de organización de los socialistas vascos, Rodolfo Ares, según fuentes próximas al líder del PSE.

El hecho de que López piense en confiar esta difícil y a menudo poco gratificante tarea a su número dos da cuenta de la importancia que en Euskadi tiene el máximo responsable de una policía que, desde que nació, ha sido acusada de trabajar al dictado del PNV. Su labor es muy cuestionada porque, pese a que es al cuerpo policial al que suelen acudir los ciudadanos que observan algo sospechoso y el que realiza la investigación de gran parte de los atentados, durante la pasada legislatura, por ejemplo, no desarticuló ningún comando, tan solo efectuó arrestos sueltos y poco relevantes.

Todos los representantes de los cuerpos policiales consultados (SUP por parte de la Policía; y UO, AUGC y ASIGC, de la Guardia Civil) albergan la esperanza de que, bajo una dirección no nacionalista, la lucha de la policía vasca contra la banda dé un gran salto. Por lo menos esperan que mejore la cooperación con el resto, colaboración que, pese a los esfuerzos del ministro Alfredo Pérez Rubalcaba, ha tenido muchas carencias.

LOS COMPROMISOS De hecho, López ha dicho abiertamente que si es elegido dará a la Ertzaintza "instrumentos para detener etarras. No habrá mandos intermedios que decidan lo contrario". Y el PSE se comprometió, en el programa electoral, a coordinar "a fondo y sin complejos la acción" de la policía vasca con el resto de cuerpos de seguridad.

Si desgraciadamente los cuerpos policiales son muy celosos a la hora de compartir su información, en el caso de la policía vasca la cerrazón todavía es mayor. Sirva como ejemplo que, tras el último atentado --contra la sede del PSE en Lazkao--, permitió la entrada a los artificieros de la Guardia Civil y la Policía muchas horas después de que estallara la bomba y tan solo cinco minutos antes de que entrara la prensa, pese a que el protocolo entre el Gobierno central y autonómico obliga a que un especialista de ambos cuerpos pueda acceder a las áreas afectadas.

PROFESIONALIDAD No obstante, todos los expertos consideran que la Ertzaintza es un cuerpo bien formado, pagado y con buenos medios, por lo que, con una dirección más firme contra ETA y una comunicación más fluida con el resto, la lucha contra la banda progresará.

El sindicato mayoritario en la Ertzaintza, Erne, es el primero que reconoce la presión del PNV, por eso espera que el nuevo consejero "acabe con el clientelismo", de forma que en los ascensos "solo" prime la capacidad de los agentes.