El portavoz de Batasuna, Joseba Permach, afirmó ayer que las reflexiones efectuadas por dirigentes de la izquierda aberzale en los últimos días corresponden a "todo el colectivo". Negó de esta forma cualquier fisura interna, y descartó que las palabras de Arnaldo Otegi o del líder del sindicato LAB, Rafa Díez, fueran realizadas "a título personal".

En una rueda de prensa en San Sebastián, Permach quiso dar un mensaje de unidad para evitar que los sucesivos pronunciamientos de líderes de la izquierda aberzale, que han comparecido cuatro veces en cuatro días, dieran una imagen de división o falta de consenso. Otegi había reconocido que el último comunicado de ETA había despertado "confusión" en Batasuna por mantener el alto el fuego y reservarse el derecho a atentar, y Rafa Díez contradijo el último comunicado, que consideraba que el proceso seguía pese al atentado. Permach dijo que "comparte" ambas reflexiones, porque no hay "proceso con bombas", pero añadió que "tampoco con leyes de excepción".

La comparecencia de ayer sirvió para calibrar los últimos pronunciamientos. Las palabras de Otegi y Rafa Díez están en la línea de cambios solicitados por los partidos tras el atentado de Barajas, aunque están influidas por el hecho de que será casi imposible que la izquierda aberzale comparezca a las próximas elecciones si no hay un alejamiento de la violencia.

Hasta ahora, el análisis de Batasuna del proceso de paz siempre había vertido todas las responsabilidades en el Gobierno central y el PNV, pero en los últimos días se ha asumido la necesidad de reflexionar desde el nacionalismo radical. La portavoz del Gobierno vasco, Miren Azkarate, declaró que las reflexiones de Otegi y Díez "reflejan una posición sincera", aunque falta ver "hasta dónde pueden llegar".

Por otra parte, la Ertzaintza colgó ayer en su web www.ertzaintza.net las fotos de los presuntos etarras Aritz Arginzoniz, de 22 años, y Saioa Sánchez, de 25, buscados desde la detención de otros dos supuestos terroristas en el sur de Francia.