El futuro Plan Estratégico del Patrimonio Natural y la Biodiversidad, cuyo borrador se ha dado a conocer hoy, contempla una estimación presupuestaria de 750 millones de euros durante sus seis años de vigencia. Así se señala en el capítulo VII dedicado la estima presupuestaria del Plan que facilitará la conservación, uso sostenible y, en su caso, la restauración del patrimonio ambiental y la riqueza natural española. El borrador del Plan aborda cuestiones como conservación de la naturaleza, sistemas agrarios, ecosistemas forestales, aguas continentales y de transición, sistemas marinos, medio urbano, turismo de naturaleza, especies exóticas invasoras o cambio climático y aporta numerosos datos como que "la superficie urbanizada en España ha crecido un 30%" en una década. La mayor partida de los 750 millones de euros corresponde a los ecosistemas forestales con 437 millones, de los cuales 432 son para la defensa contra incendios forestales, el capítulo agrario supondrá 60 millones de inversión, y 48 millones el de conservación de la naturaleza (desde regular el acceso a recursos genéticos a la restauración de hábitats). En medio marino se presupuestan 28 millones, 30 millones para impacto global y cooperación internacional, 10 millones para el turismo en la naturaleza y otros 10 para la lucha contra especies exóticas invasoras. Promover la custodia del territorio conllevará cinco millones de euros y doce millones la aplicación eficaz de los procedimientos de evaluación de impacto ambiental. Otros nueve millones de euros corresponden al capítulo de Gobernanza con acciones como reducir el impacto de la compra y la contratación pública en la biodiversidad, que contará con un millón de euros. En la elaboración de la versión preliminar Plan, que ha presentado la secretaria de Estado de Cambio Climático, Teresa Ribera, han participado la administración Central, las Comunidades Autónomas, la comunidad científica, los agentes económicos y sociales y las organizaciones sin fines lucrativos interesadas. El texto recuerda que España es uno de los países con mayor biodiversidad de la UE, con más 8.000 especies de plantas vasculares, de las que 1.500 son endemismos, lo que representa el 85% de todas las inventariadas en Europa. Entre las amenazas cita desde la pérdida de hábitats, hasta la sobreexplotación de recursos o la pérdida de variabilidad genética. Respecto al cambio climático, señala que afecta a la biodiversidad y debe considerarse de manera horizontal en la aplicación de cualquier política de conservación" Así señala que "muchas especies pueden verse en riesgo de extinción al disminuir sus hábitats potenciarles y no poder desplazarse hacia zonas favorables cuando el clima vaya cambiando. Este efecto será crítico si no se asegura la conectividad territorial".