Por unanimidad. Con ese distintivo aprobó ayer la asamblea general del PNV la ponencia política que aboga por un amplio acuerdo entre partidos y gobiernos sobre el derecho de autodeterminación y avala celebrar una consulta si el diálogo se bloquea. El texto asumió la práctica totalidad de las enmiendas, pero los delegados rechazaron, sin embargo, varias propuestas organizativas que venían avaladas por la dirección saliente, presidida por Josu Jon Imaz.

Esa fue quizá la única sorpresa de un cónclave con resultado previsto. Una de las dos cuestiones más novedosas que fueron derrotadas proponía eliminar el trámite por el cual es la asamblea nacional la que levanta la incompatibilidad que permite a cargos internos en las ejecutivas acceder a ser parlamentarios en la Cámara vasca, navarra o en las forales. Además, se mantiene el veto que impide a los máximos cargos directivos ir sin ser invitados a reuniones de órganos internos de cada territorio.

La coordinadora de la ponencia, Josune Aristondo, minimizó el varapalo a las dos propuestas, se felicitó del "debate sereno" de la asamblea y aventuró que estos asuntos se abordarán porque "están sobre la mesa". El texto había sido ya objeto de un pacto antes de su aprobación por la ejecutiva. La asamblea dio luz verde a 138 enmiendas.

El documento que será guía de la política del PNV propone un acuerdo sobre el ejercicio del "derecho a decidir" entre partidos y entre instituciones vascas y españolas. Y confirma como "prioritario" el logro de la paz.

NUEVO LIDER El hasta ahora portavoz del PNV, Iñigo Urkullu, será confirmado hoy nuevo presidente del partido. Su candidatura fue pactada por los sectores hasta ahora en liza, representados por Josu Jon Imaz y Joseba Egibar. Una asamblea votará el próximo día 14 a los ocho miembros de la ejecutiva, que lo serán por elección directa.