El duelo entre Joseba Egibar y Josu Jon Imaz por la presidencia del PNV se dirimirá hoy. La incógnita sobre quién sucederá a Xabier Arzalluz se desvela un mes antes de la fecha prevista con la reconocida intención de evitar que el encono entre las candidaturas y la discusión desemboque en una crisis interna.

Formalmente, la asamblea general prevista para el 17 y 18 de enero será la encargada de votar al nuevo presidente de la ejecutiva peneuvista. Pero las 250 asambleas convocadas para hoy determinarán ya la identidad del ganador. Los afiliados eligen a sus delegados para el congreso, pero éstos acuden con un mandato de votar a Egibar o a Imaz.

Afines a cada sector admitieron ayer la imposibilidad de un pronóstico claro. Egibar, que arrancó como perdedor, remontó sus expectativas al lograr el apoyo de Guipúzcoa. El holgado apoyo a Imaz en Vizcaya, donde está el grueso de la militancia, no le asegura la victoria.