La institución pesó ayer más que la política en una decisión del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ). El pleno de este organismo decidió no reprobar al recién nombrado ministro de Justicia, Mariano Fernández Bermejo, contra lo que habían propuesto cuatro vocales de la mayoría conservadora.

Prácticamente por unanimidad emitió una declaración que da la bienvenida al ministro y, respecto a la polémica sobre la carencia de legitimidad de los actuales vocales cuyo mandato caducó en noviembre, señala que el actual CGPJ seguirá con sus funciones hasta ser renovado "con plena legalidad".

La controversia arrancó en la toma de posesión del ministro, al afirmar que el actual Consejo carece de legitimidad. Tras estas declaraciones, los vocales de la mayoría conservadora propusieron al CGPJ que reprobara al ministro y emitiera una declaración que dejara claro que el Consejo es "legal y legítimo".