El general croata Ante Gotovina, uno de los criminales de guerra más buscados del mundo, fue detenido el miércoles en el restaurante de un hotel de Tenerife por orden del Tribunal Penal Internacional para la antigua Yugoslavia (TPIY), que dictó su captura en el 2001. Tras este arresto, quedan por localizar el exlíder serbobosnio Radovan Karadzic y al general Ratko Mladic.

La detención fue anunciada en Belgrado por la fiscal del TPIY, Carla del Ponte. "Tengo una noticia muy buena que recibí hace una hora: Ante Gotovina fue arrestado anoche en las islas Canarias, se encuentra en la cárcel y será trasladado a la Haya", comentó a la prensa.

A partir de ese momento, se sucedieron las felicitaciones a la policía española y a Croacia, que ha prestado una valiosa ayuda para la localización de Gotovina, pese a las críticas que ha soportado por su escasa colaboración con el TPIY. La desaparición del general era uno de los obstáculos para que Croacia pudiera comenzar las negociaciones de ingreso en la Unión Europea.

LLAMADA INTERCEPTADA Del Ponte informó de que la policía seguía la pista al general desde septiembre. Los agentes españoles le localizaron después de que se interceptara una llamada que hizo a su país desde Canarias, según fuentes atlánticas.

Por su parte, fuentes de la investigación han explicado que el criminal de guerra llegó a Tenerife cinco días antes de su arresto. En el Hotel Bitácora, de cuatro estrellas, situado en la Playa de las Américas, se registró con una identidad falsa, que era conocida por la policía. El hombre que le acompañaba usaba documentación falsa australiana.

Gotovina, según el Ministerio del Interior, fue localizado por los agentes cuando cenaba en el restaurante del hotel. Los funcionarios procedieron a su detención, a pesar de que sospechaban que iba armado y escoltado. El general no prestó resistencia.

En el momento de su detención llevaba un pasaporte falso, en el que junto a su foto figuraba el nombre de Kristian Horuat, de nacionalidad croata. También tenía 12.000 euros en efectivo. Los agentes han entregado al juez una maleta con los enseres personales que el criminal de guerra tenía en su habitación.

TRASLADO A MADRID Gotovina fue trasladado a la comisaría de Tenerife, donde se procedió a su identificación. Por la tarde, fue conducido a Madrid en un avión de las fuerzas armadas acompañado por ocho agentes policiales. Inmediatamente fue trasladado a la Audiencia Nacional en medio de un amplio dispositivo de seguridad. El juez Félix Degayón, en funciones de guardia, y el fiscal Miguel Angel Carballo le leyeron los cargos. La ley exige a España la entrega inmediata del criminal de guerra a la Haya sin que se tramite en nuestro país el proceso de extradición.

El Tribunal para la Antigua Yugoslavia le acusó en el 2001 de haber "planificado, instigado y ordenado entre julio y noviembre de 1995 deportaciones, asesinatos, desplazamientos, persecución de personas, saqueo y destrucción de bienes públicos y privados, y destrucción de ciudades, pueblos y aldeas, sin motivo". Además, en esa época dirigió la operación Tormenta, en la que Croacia recuperó la región de Krajina, que había pasado a manos serbias. En esa acción murieron 150 civiles serbios y 200.000 fueron deportados.

El general estuvo en el despacho del juez 10 minutos, el tiempo que tardó éste en leerle un resumen del acta de acusación. Gotovina rechazó la presencia de un traductor porque entiende el español y no quiso dar explicaciones. "Estuvo impasible y frío", dijeron fuentes judiciales.

El criminal de guerra presentaba "una aspecto magnífico, estaba bronceado y muy bien conservado", según fuentes judiciales. El juez le mandó a la cárcel de Soto del Real (Madrid) hasta que sea trasladado a la Haya.