El fiscal francés Jean-Claude Marin explicó ayer que los cuatro presuntos miembros del aparato militar de ETA detenidos en Cahors (Francia) podrían ser condenados a cadena perpetua. Luis Ignacio Iruretagoiena, Oihan Barandalla, Ander Mugika y Alaitz Aramendi serán imputados por los delitos de secuestro, fabricación de explosivos y robo a mano armada, con el agravante de pertenencia a banda armada. Con todo, el código penal francés establece que los condenados a perpetuidad cumplan 30 años de reclusión como máximo. Las autoridades francesas consideraron "odioso" que el hijo de 5 años del matrimonio raptado en Las Landas tuviera que ver a sus padres atados y con los ojos vendados.

Por otro lado, la patronal navarra cifró ayer en mil los empresarios extorsionados por ETA en Navarra, Euskadi y en otras comunidades.