La secretaria de política autonómica del PP, Soraya Sáenz de Santamaría, advirtió ayer de que la aplicación del nuevo Estatut de Cataluña puede provocar que se "aumenten los impuestos a todos los españoles".
La explicación que ofreció, junto con el secretario de política económica del PP, Alvaro Nadal, es la siguiente: Si una de las pretensiones del Estatut es que Cataluña reciba más dinero, solo hay tres soluciones: o se reduce la parte de los impuestos que percibe el Estado, o disminuye lo que obtienen otras comunidades, o aumenta la presión fiscal. Sobre esta última posibilidad, Nadal explicó que Cataluña deberá incrementar el tramo que obtiene de algunos impuestos, o bien subirá la recaudación fiscal a costa de todos los españoles.
El inconveniente, según los populares, es que el resto de regiones también quieren aumentar su financiación. Entonces, "si la cifra se dispara y el Estado no tiene manera de soportarlo, el problema solo se solucionará con una subida generalizada de impuestos", aseguró Nadal. Además, según el PP, el hecho de que la carta obligue a que la ley de financiación de todas las comunidades se defina a partir de sus disposiciones e invada competencias estatales provocará una "reordenación profunda" de la administración del Estado.
Este partido considera que se originarán multitud de conflictos con otras autonomías. "El Estatut generará la desestabilización del sistema", advirtió Saénz de Santamaría. Otra de las "preocupaciones" del PP es que todavía no se sabe si el nuevo modelo "beneficiará" a Cataluña.
