Mariano Rajoy afirmó ayer que la Constitución europea "no es la repanocha" y "no arregla el mundo". Pese a ello, añadió, va a apoyar la Carta en el referendo del 20 de febrero porque no encuentra "motivos para votar no ". El presidente del PP insistió en el compromiso de su partido con el Tratado y acusó al Gobierno de "ponerse la venda antes de la herida" al criticar al PP por una supuesta tibieza en la defensa de la Constitución.

Rajoy, en un guiño a su electorado más conservador y católico, advirtió a Zapatero de que "hay mucha gente a la que no le gusta que el Gobierno esté metiéndose constantemente con ellos".

El líder popular hizo estas afirmaciones en Almería, en una visita al estadio de los próximos Juegos Mediterráneos y en un posterior coloquio organizado por La Voz de Almería .

En dicho coloquio, Rajoy hizo un repaso crítico del Ejecutivo en todos los frentes. En política exterior, afirmó que "España no puede permitirse el lujo de tener un presidente que no pueda hablar con el presidente de EEUU", en alusión al complejo momento que atraviesan las relaciones bilaterales tras la retirada de las tropas españolas de Irak.

BURLAS A MORATINOS También ironizó sobre el encuentro del miércoles en Bruselas entre el jefe de la diplomacia, Miguel Angel Moratinos, y su homóloga estadounidense, Condoleezza Rice. "Al señor Moratinos le tenemos, al pobre, corriendo de sofá en sofá para ver si consigue una imagen de cuatro o cinco minutos con Rice", dijo.

Respecto del modelo de Estado, avisó de que su partido rechazará toda reforma estatutaria que pretenda "arrebatar" competencias al Estado y sólo apoyará aquéllas que busquen "hacer más eficaces los servicios".

AUSENCIA ITALIANA Por su parte, el primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, no asistirá finalmente al mitin que se celebrará hoy en Barcelona a favor de la ratificación de la Constitución europea, a causa de la gripe que padece desde hace días. El acto principal de la campaña socialista a favor del contará con la presencia de Zapatero y sus homólogos francés y alemán, Jacques Chirac y Gerhard Schröder, respectivamente.

Mientras, Josep Lluís Carod-Rovira acusó ayer a los socialistas catalanes, a CiU y al PPC de actuar con "resignación". El presidente de ERC aseguró que Zapatero y Rajoy jamás aceptarían votar a favor de un Tratado en el que no estuviera "ni su país ni su lengua", por lo que se preguntó por qué Maragall, Mas y Piqué sí lo hacen.