Los piratas se han convertido en uno de los argumentos más fuertes de la política española en las últimas horas. La alegría por la liberación de los pescadores del Alakrana no ha durado ni 24 horas. Ayer, en el Congreso de los Diputados se vivió, entre la sala de plenos y las conferencias de prensa, una batalla dialéctica entre los dirigentes del PP y los del PSOE y el Gobierno, que se acusaron, por activa y por pasiva, de estar apoyando a los piratas con sus respectivas actitudes.

Abrió el fuego el presidente del PP, Mariano Rajoy, por la mañana, con una rueda de prensa en el Congreso en la que acusó al Gobierno de haber actuado con "incompetencia, improvisación y soberbia" en este caso y anunció que reclamará la reprobación de la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, de la ministra de Defensa, Carme Chacón, y del titular de Justicia, Francisco Caamaño. A la misma hora, el PP repartía entre sus cargos públicos un argumentario con un decálogo de críticas al Gobierno titulado "Zapatero es un chollo para los piratas". Según el documento, en la gestión de la crisis ha habido imprevisión, descoordinación, improvisación, desinformación, ineptitud, debilidad, engaño, incapacidad, desprotección a los pesqueros y pura contradicción.

DEJADEZ Con este ambiente caldeado, la tensión en la sesión de control del Gobierno estaba asegurada. La portavoz del PP, Soraya Sáenz de Santamaría, utilizó su pregunta a la vicepresidenta primera para descalificar la gestión de esta crisis por parte del Gobierno, acusarla de dejadez e incluso personalizar las críticas al destacar que De la Vega viajó a Argentina mientras no se veían salidas al secuestro.

La respuesta de la vicepresidenta fue contundente y parecía casi una réplica al citado argumentario conservador. De la Vega acusó a los populares de intentar sacar rédito electoral de todo, y en este caso no tener reparos ni siquiera en "ponerse al lado de los piratas" para lograrlo. Evitó responder a las cuestiones planteadas por la popular, e intentó derivar el debate de fondo a la comparecencia que ella misma ha pedido en el pleno.

Ni el PP admitió en ningún momento que durante algunas fases del secuestro sus críticas internas podían estar interfiriendo negativamente en las negociaciones, ni los socialistas reconocieron errores de descoordinación o a la hora de decidir traer a España a los dos piratas detenidos en el Indico. El portavoz del PSOE, José Antonio Alonso, puso como prueba de que el Gobierno ha actuado bien que el secuestro ha finalizado. Eso sí, ni una palabra del pago del rescate.

MAS SEGURIDAD Estos rifirrafes, cuando los pescadores liberados todavía están navegando hacia un puerto seguro, fueron solo el aperitivo de lo que puede suceder a partir de hoy. El PP defenderá en el Congreso una moción que insta al Gobierno a reforzar la seguridad de los pesqueros que faenan en el Indico.

Los socialistas tendrán que emplearse a fondo para obtener los suficientes apoyos para evitar que prospere. En esta ocasión, tanto CiU como el PNV apoyan, de entrada, la moción. Los vascos insisten en la necesidad de que se embarquen militares en los pesqueros, en lugar de agentes de seguridad privada.

El presidente del PNV en Vizcaya, Andoni Ortuzar, marcó, en Onda Cero, la línea a seguir: "¿Para qué queremos el Ejército español? ¿Qué pintan en el acuartelamiento de Mungia o Mundaka? ¿No sería mejor que estuvieran defendiendo a nuestros pescadores?".