Dispuestos a no perder el voto de ni un solo uniformado, ni el PP, ni Ciudadanos ni Vox quisieron faltar ayer a la manifestación convocada por Jusapol, la asociación más radical del panorama sindical de las fuerzas y cuerpos de seguridad.

Cerca de 20.000 policías, guardias civiles y familiares -según la policía municipal; 100.000 según los organizadores- marcharon en el centro de Madrid, entre la Puerta del Sol y el Congreso, para exigir al Ministerio del Interior una equiparación salarial «real» de sus respectivos cuerpos con el de Mossos d’Esquadra.

Y, al frente de la marcha, agarrando la pancarta, caminaron el presidente de Cs, Albert Rivera, y los secretarios generales del PP, Teodoro García Egea, y de Vox, Javier Ortega Smith, abogado de la acusación popular en el juicio del procés.

García Egea se quedó con el jamón mediático que se rifaba en la convocatoria, sobreponiendo su voz al estruendo de megáfonos: «Me gusta más ver esta plaza llena de servidores de España que de perroflautas». Sol fue el escenario, en la primavera de hace ocho años, de la gran acampada de indignados del 15-M.

DISOLVER LOS MOSSOS / El número dos popular acusó al PSOE de «archivar en un cajón» sus compromisos de equiparación salarial, y reivindicó a su partido por «cumplir sus promesas».

Rivera, por su parte, aprovechó los micrófonos para afear a Pedro Sánchez que «no haya cumplido» con el acuerdo que hizo con Cs para equiparar los salarios de los policías estatales con los autonómicos. El líder naranja prometió que, si gobierna, esos salarios serán plenamente iguales en el plazo de dos años.

Pero de los tres dirigentes de la derecha, fue Ortega Smith el que se vio más arropado por los aplausos y palmadas en el hombro de los asistentes. El número dos de Vox, además de prometer la equiparación, aseguró que su partido promoverá en el Congreso que las autonomías devuelvan las competencias en materia de seguridad, y «disolver las policías autonómicas y que (sus miembros) puedan integrarse en la Policía Nacional y en la Guardia Civil».

Acusando de apesebrados a los sindicatos tradicionales de Policía y las asociaciones de la Guardia Civil, Jusapol ha denunciado siempre que el acuerdo que hace un año firmaron esas organizaciones con Interior es un engaño. Y lo ha mantenido, incluso, pese a los incrementos que las nóminas de policías y guardias han registrado el año pasado y este abril.

Falta aún una tercera fase de subidas, hasta alcanzar los 807 millones de euros presupuestados en el pacto. Jusapol pedía 1.500 millones. Nathan Espinosa, líder de la plataforma, anunció que este es el comienzo de una nueva campaña de protestas y recordó que piden «igualdad, no subidas salariales».