El Congreso aprobó ayer la reforma de la ley del Poder Judicial que elimina la excedencia forzosa de los jueces que decidan dedicarse a la política y el acceso a la carrera judicial por el llamado tercer turno, que introdujeron los gobiernos socialistas. La nueva ley sólo contó con el apoyo de PP y Coalición Canaria.

La reforma establece que los jueces que se dediquen a la política por ser elegidos parlamentarios o tras ser designados como cargos públicos no tendrán que pasar tres años de excedencia cobrando el sueldo base. Podrán reingresar inmediatamente o seguir en excedencia sin cobrar.

También se suprime el tercer turno por el que abogados y juristas podían acceder a ser jueces tras haber ejercido seis años después de aprobar un concurso-oposición. La ley crea las oficinas judiciales y regula un nuevo Estatuto de jueces y magistrados.