Madrid El PP tuvo que pedir perdón ayer. Mariano Rajoy, en su día ministro del Interior --y, por tanto, exresponsable de seguridad vial-- decidió cerrar el curso político con un vídeo grabado camino de Pontevedra. Todo pare-cía estar estudiado, hasta el toro de Osborne que aparece al comenzar la secuencia, en protesta por la prohibición del toreo en Cataluña. Pero, sorpresa imprevista, Rajoy sermonea a sus simpatizantes desde el asiento de atrás del coche y sin el obligatorio cinturón de seguridad abrochado. "Es un error de un minuto y 33 segundos que ni Mariano Rajoy ni nadie debemos cometer. Por ello, pido disculpas", se excusó su jefe de gabinete, Jorge Moragas.