El PP ha diseñado una estrategia contra el plan Ibarretxe en la que espera contar con socialistas vascos críticos con la línea del partido. La dirección conservadora quiere presionar así a José Luis Rodríguez Zapatero para que el PSOE se sume al PP en un frente contra el nacionalismo vasco.
Mariano Rajoy y el artífice de esta estrategia, Jaime Mayor Oreja, han mantenido contactos con empresarios e intelectuales vascos para explicarles las razones de su rechazo al plan del lendakari.
Para este frente antinacionalista, Rajoy y Mayor Oreja cuentan, por ejemplo, con el apoyo del exsecretario general del PSE Nicolás Redondo y la edil de ese partido Gotzone Mora, disconformes con la negativa de la dirección de los socialistas vascos a hacer seguidismo de la línea del PP.
APOYO A MAYOR OREJA
Redondo presentó ayer en Madrid una conferencia de Mayor Oreja. El exministro propuso una "agenda del cambio" para relevar al nacionalismo vasco del poder. Esta alternativa, dijo, es la opción "más urgente y decisiva" de la política española. Mayor se vio en la necesidad de explicar que el gesto de Redondo no era un "revival " de antiguas colaboraciones, pero destacó que quienes coinciden en la "envergadura" del envite del nacionalismo deben "superar sus diferencias" para defender la Constitución y el Estatuto. El PSE anunció que no tomará medidas contra Redondo.
Por otra parte, PP y PSE unieron ayer sus votos en las Juntas Generales de Alava para avisar de que promoverán que este territorio se separe de Euskadi si llega a "materializarse" la propuesta de libre adhesión a España que propugna Juan José Ibarretxe.
