El PP se está planteando, ante los supuestos movimientos de la izquierda abertzale para estar presente en las elecciones locales vascas, instar públicamente al PSOE a suscribir un pacto político más allá de la reforma electoral que refuerce su compromiso contra la legalización de Batasuna. Distintas fuentes de la cúpula del PP han reconocido a Efe su "preocupación" por las informaciones que inciden en posibles vías hacia el final de ETA y por recientes declaraciones de dirigentes del PSOE, quienes a lo largo de los últimos días han dejado ver que si Batasuna quiere ser legal, bastaría con que rechazara y condenara la violencia de forma clara y tajante. El asunto ya se abordó en la reunión del Comité de Dirección del PP del pasado lunes y todos los presentes abandonaron la sesión con una consigna clara: "el mensaje fundamental que hay que dar es que sólo vale la disolución, nada más", afirma una fuente de la dirección. "El PP no va aceptar bajo ningún concepto que Batasuna esté en las elecciones municipales y forales del año que viene si ETA no se ha disuelto antes; no podemos volver a los errores del pasado", subraya un dirigente del partido, para quien esta clase de "aproximaciones a la democracia" de la izquierda abertzale se repiten siempre en víspera electoral. Sin embargo, según diferentes declaraciones de altos cargos del PP, la voluntad de ETA o de su "brazo político", Batasuna, de abandonar la violencia está muy lejos de confirmarse, ya que, puntualizan las fuentes, en sus documentos internos no reniegan de la lucha armada y continúan enviando cartas de extorsión a empresarios. Sin embargo, "las manifestaciones ambiguas" de muchos cargos del PSOE, empezando por el propio José Luis Rodríguez Zapatero, han creado preocupación en la dirección del PP, cuyos integrantes, afirman la mayoría de ellos, no han recibido directamente del Gobierno ningún mensaje que apunte a la disolución de ETA. Al contrario, del Gobierno apenas reciben información sobre la estrategia de Batasuna, y este hecho, como hoy mismo ha afirmado Esteban González Pons, induce a los populares a pensar que si no hay negociación con la banda, al menos lo parece. Aparte de reiterar que sólo cabe la disolución de la organización terrorista, los populares han encendido ya todas sus luces de alerta para denunciar, en cuanto haya constancia de ello, cualquier maniobra encaminada a la legalización de Batasuna o de fuerzas satélite. Según ha señalado una fuente de la plana mayor del PP, el partido de Mariano Rajoy se está planteando instar al PSOE a que, además del pacto parlamentario para endurecer la Ley de Partidos y la legislación electoral, suscriba un acuerdo político que deje claro a la izquierda abertzale que mientras ETA siga en activo, incluso a "bajísima intensidad", no podrá en ningún caso acudir a unas elecciones. El Partido Popular, por otro lado, ve también con preocupación el futuro del acuerdo para la reforma electoral y el endurecimiento de la ley de partidos, que hace dos semanas presentaron en el Congreso socialistas y populares. A la espera de iniciar la tramitación, el PP teme que haya "algo" que al final instale al Partido Socialista en la ruptura del acuerdo.