En contra del deseo de los socialistas, el líder de la oposición, Mariano Rajoy, acude hoy al Congreso con la intención de esquivar el debate ideológico y entrar de lleno en el terreno de la crítica a un Gobierno que, a su juicio, puede presumir de "mucha palabrería" y "poca eficacia" frente a la crisis.

Así, el entorno de Rajoy maneja la hipótesis de que el presidente, José Luis Rodríguez Zapatero, intentará afrontar el debate de la nación "vendiendo brotes verdes", esto es, recalcando que ya hay signos de recuperación económica. No obstante, el PP rechaza esa tesis y apunta que, tras el optimismo de Zapatero, se esconde pura estrategia electoral. "No me extrañaría nada que el presidente vuelva a mentir en el Congreso para ganar las europeas", afirmó ayer la vicesecretaria del PP, Ana Mato.

De hecho, uno de los ejes del discurso que pronunciará hoy Rajoy hará hincapié, a lo largo de la jornada, en que Zapatero ya "mintió" a los españoles antes de las últimas generales negando la existencia de la crisis y que ahora, en vísperas de los comicios europeos, busca hacer lo mismo al augurar buenas perspectivas.

SER LA ALTERNATIVA Rajoy pretende intercalar la crítica ácida con la presentación de una alternativa. Según fuentes populares, su presidente, que ayer preparó el discurso en su casa, propondrá acometer reformas estructurales.