El Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero no tiene claro qué hacer con una vieja demanda de muchas comunidades: la presencia directa en los consejos de ministros de la Unión Europea (UE). Aunque el programa electoral del PSOE proponía "la inclusión de representantes de las comunidades autónomas en las delegaciones de España ante los consejos de ministros de la UE", el Ministerio de Administraciones Públicas no aclara hasta qué punto se cumplirá.

El jueves, ante los consejeros autonómicos, Jordi Sevilla sólo propuso que las comunidades participen en las delegaciones españolas "que tomen parte en determinadas reuniones en Bruselas y que se correspondan con el ámbito competencial autonómico". Las autonomías, integradas en 50 grupos de trabajo en Bruselas, aspiran a sentarse junto al ministro español, o en su lugar, cuando los consejos de la UE debaten asuntos de su competencia. Una alternativa que, por el momento, el ministro deja en el aire.

En una próxima reunión de la Conferencia para Asuntos Relacionados con las Comunidades Europeas (CARCE), Sevilla propondrá a las autonomías designar de forma consensuada a uno de los emisarios del Gobierno en la Representación Permanente de España ante la UE. Las comunidades tienen desde 1996 un representante en Bruselas pero fuentes del ministerio dicen que es más práctico eso para las CCAA que estar en los consejos.