José Luis Rodríguez Zapatero defendió ayer la respuesta "acertada y elemental en democracia" del Ejecutivo ante la amenaza del teniente general José Mena contra la reforma del Estatuto de Cataluña y negó que las declaraciones del jefe de la Fuerza Terrestre, sometido a arresto domiciliario, reflejen malestar entre los militares.

El presidente del Gobierno se pronunció ayer por primera vez en público sobre las advertencias del general Mena durante la Pascua Militar y señaló que sólo ha habido unas declaraciones de un alto funcionario público que fueron "un error" y a las que el Gobierno ha respondido como debía. En un desayuno del foro Nueva Economía, Zapatero destacó la opinión mayoritaria a favor de la decisión del Gobierno, que ha consistido, dijo, en "aplicar la ley como mejor forma de aplicar la Constitución".

AGUIRRE SE DESMARCA La presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, se desmarcó ayer claramente de la línea de Mariano Rajoy. Si el líder del PP justificó el lunes la arenga del militar porque, según dijo, "Zapatero está jugando a la ruleta rusa con el Estatut y generando tensiones inútilmente", Aguirre dijo que su partido no sólo denuncia la política de Zapatero, sino también, "con toda contundencia y sin reservas, a todos los que, como el general Mena, se salen de su sitio e incumplen las leyes".

Según la presidenta madrileña, "en una democracia liberal y avanzada como la española, los militares están en silencio y a las órdenes del único poder, que es el que dimana del pueblo español y que está a las órdenes del poder civil".

Entretanto, 50 militares retirados, de los 300 compañeros de promoción de Mena, firmaron una carta de apoyo al oficial arrestado, en la que manifestaron que sus declaraciones eran "reflejo de la opinión y la inquietud de muchos de los mandos y subordinados de las unidades a sus órdenes". La misiva, que fue publicada por el diario La Razón, añade que Mena expresó "una opinión y un sentir que, sin duda, el Gobierno ya tenía que conocer perfectamente a través de otros cauces oficiales y, muy especialmente, de los servicios de inteligencia o información del Ministerio de Defensa". Para el secretario general del grupo socialista, Diego López Garrido, esa carta representa una opinión de personas que "no están en el ejercicio de la función pública ni en el mando", ya que se trata de militares retirados que ejercen "su libertad de expresión".

También los tenientes generales en la reserva Angel Lobo García y José Ramón Pardo de Santayana, junto con el exgobernador militar de Madrid, general de división en la reserva Antonio Eleta Sequera, salieron en defensa de Mena en cartas personales publicadas en el diario Abc.

Otros militares jubilados enviaron telegramas de apoyo al arrestado y dos asociaciones de oficiales en la reserva insistieron ayer en mostrar su solidaridad con Mena.