Hacía 13 años que un presidente del Gobierno central no pisaba el Palacio de la Generalitat, sede del Gobierno catalán. El último en hacerlo fue José Luis Rodríguez Zapatero, en agosto de 2007, cuando visitó al 'president' José Montilla y hablaron de inversiones para Cataluña. Los dos dirigentes pasaron revista a una formación de los Mossos d'Esquadra a la entrada del palacio, el mismo recibimiento que ahora, casi trece años después, hará Quim Torra a otro jefe del Ejecutivo socialista.

Es la segunda vez que Pedro Sánchez viaja a Barcelona para reunirse con Quim Torra. Ya lo hizo en diciembre del 2018, pocos meses después de la moción de censura que lo convirtió en presidente, pero entonces el encuentro tuvo lugar en el Palacio de Pedralbes. Meses antes, había sido el líder socialista el que abrió las puertas de la Moncloa al catalán.

La relación de los presidentes del Ejecutivo central con los del 'govern' ha sido siempre peculiar, como también lo han sido las visitas de los mandatarios estatales a la sede del Ejecutivo catalán. La gran mayoría de viajes a Cataluña de los presidentes del Gobierno han tenido como marco la campaña electoral. Los hicieron en representación de sus partidos en un territorio clave para vencer en las generales. También para inauguraciones, foros empresariales o económicos o incluso visitas a zonas afectadas por algún temporal o atentado terrorista. Apenas un puñado de veces lo hicieron para una reunión institucional Moncloa-Generalitat.

Ninguno de los presidentes del Partido Popular, José María Aznar primero y Mariano Rajoy después, estuvieron en el Palacio de la Generalitat. Jordi Pujol frecuentó la Moncloa en 1996, cuando meses de negociaciones convirtieron a Aznar en presidente con el apoyo de los nacionalistas catalanes. El líder popular también visitó Cataluña, pero no llegó a pisar el 'palau': donde ambos líderes sellaron su acuerdo fue en un hotel, el Majestic, que pasó a la historia por bautizar el acuerdo.

Rajoy tampoco se dejó ver en la sede de la Generalitat en sus más de seis años en Moncloa, donde sí recibió a los diferentes presidentes catalanes. Fueron años de desencuentros entre el 'Govern' y el Estado central, y aunque Rajoy sí viajó a Cataluña, la mayoría de sus visitas fueron en campaña electoral, para celebrar eventos de partido o foros de obligada asistencia dentro de su agenda institucional.

Las tres veces de Zapatero

En mayo de 2004, Zapatero visitó por primera vez el Palacio de la Generalitat como presidente del Gobierno. Y lo hizo con el único propósito de reunirse con el presidente de la Generalitat, Pasqual Maragall. Antes ya había estado en calidad de líder del PSOE para reunirse con Pujol y animarlo a firmar el pacto antiterrorista, en el 2000, y para la toma de posesión de Maragall en 2003. Después vendrían otras dos visitas a la sede del 'Govern', en julio de 2006 y en agosto de 2007, ya con José Montilla en el Ejecutivo.

Felipe González tardó tres años en viajar a Cataluña como presidente del Gobierno. Tras ganar los comicios de 1982, acompañó al PSC en mítines y eventos electorales, pero su primera visita oficial fue un foro económico en Lloret de Mar en 1985. González aprovechó el viaje para reunirse con Pujol por tercera vez en un mes, pero ninguno de sus encuentros fueron en plaza Sant Jaume. Moncloa era el lugar preferido para las reuniones entre 'president' y presidente. En junio de 1988, González acudió al 'Palau', pero por motivos muy diferentes: dar el último adiós a Josep Tarradellas. La capilla ardiente se había instalado en la sede de la Generalitat. En el velatorio también estuvo Adolfo Suárez, ya diputado, que había compartido diversas reuniones siendo presidente con Tarradellas. Una de ellas lo llevó hasta el 'Palau', en octubre de 1977, acompañando al 'president' a su regreso del exilio. También Leopoldo Calvo-Sotelo, pese a lo breve de su gobierno, visitó la Generalitat. Lo hizo junto al Rey para celebrar en Barcelona el día de las Fuerzas Armadas.