El presidente libanés, Michel Suleiman, visitó ayer la base Miguel de Cervantes, sede del contingente militar español y dos semanas antes de que España asuma el mando de los cascos azules en el sur del Líbano.

La de ayer fue la primera visita de un jefe de Estado libanés a las fuerzas españolas de la ONU, que comenzó a desplegarse en la zona en el 2007 y cuenta allí con un destacamento de 1.051 efectivos, según los últimos datos de la misión de la ONU. El grueso de la Brigada X está compuesto por personal de la brigada de Infantería Mecanizada Extremadura XI, con base en Bótoa (Badajoz). Suleimán visitó a los militares españoles durante cerca de una hora, tras llegar a la base a bordo de un helicóptero junto al jefe del Ejército libanés, el general Jean Kajwayi.