La formación del nuevo Gobierno catalán y los posteriores nombramientos de altos cargos harán que el grupo parlamentario del PSC, renueve, al menos, a una cuarta parte de sus 42 diputados. De los ocho diputados que se han incorporado al Ejecutivo, sólo mantendrán su condición de parlamentarios Pasqual Maragall, por su condición de presidente de la Generalitat de Cataluña, y el consejero de Política Territorial y portavoz del Gobierno, Joaquim Nadal, por haber sido cabeza de lista por Girona.

La ley permite compaginar los cargos de consejero y de diputado, pero el PSC, antes de las elecciones, ya advirtió a los candidatos sobre su voluntad de hacerlos incompatibles. Pese a conocer la existencia de esta normativa interna, algunos de los afectados se han mostrado reticentes a dejar el Parlamento catalán.

DELEGADO EN MADRID Los nombramientos de altos cargos de las distintas consejerías, que se producirán a partir de hoy, podrían hacer que otros diputados se vean forzados a renunciar a su escaño. También lo deberá hacer el exalcalde de Terrassa (Barcelona) Manuel Royes, si finalmente acepta la propuesta que ha recibido para ser el delegado de la Generalitat en Madrid. Fruto de estos cambios, el grupo parlamentario socialista ha designando a Manuela de Madre como su presidenta y a Miquel Iceta como portavoz.

Una de los primeras medidas que tomará el nuevo Gobierno catalán es reforzar las escuelas que rebosan de inmigrantes. El Consejo Ejecutivo tiene previsto aprobar antes de fin de año un acuerdo por el que se ampliarían de forma inmediata las plantillas docentes de aquellos centros públicos que escolarizan a un elevado porcentaje de extranjeros o tienen las aulas saturadas, aunque sea por efecto de los flujos internos de población. La actuación formaría parte del plan de choque que el presidente de la Generalitat, Pasqual Maragall, tiene previsto anunciar el próximo lunes.

CRITICAS Por otra parte, el presidente del Parlamento catalán, Ernest Benach, interpretó ayer que el rey Juan Carlos censura la estrategia "de tensión" de Aznar y que, cuando el Rey le recibió, dijo que "hablando se entiende la gente". En la misma línea, el consejero jefe, Josep Lluís Carod- Rovira, afirmó en TV-3: "Aznar es un presidente que tiene un problema grave de relación con todos; tiene problemas con el País Vasco, con Cataluña y con Europa. Y, por lo que parece, no es una persona con grandes relaciones con el jefe del Estado".