José Luis Rodríguez Zapatero ha tenido que acatar el pacto de Montilla con ERC e ICV ante la firmeza exhibida por el PSC. Pero Ejecutivo y PSOE no irradiaban ayer ningún entusiasmo. Los socialistas advierten como un "factor de distorsión" el hecho de que la Generalitat deba afrontar el despliegue de un Estatuto que ERC no apoyó. "Nos va a traer problemas", dijo ayer un dirigente del partido. El PP, por su parte, se mostró preocupado por la reedición del pacto. Acebes auguró que el nuevo Govern será "mucho peor" y culpó a Zapatero de ceder el "bastón de mando" a ERC.