La sentencia contra los tres policías que detuvieron ilegalmente a dos militantes del PP tras la manifestación en la que el exministro de Defensa José Bono fue increpado, volvió a elevar ayer hasta límites imprevisibles la bronca entre el PP y el PSOE. El portavoz socialista en el Congreso, Diego López Garrido, comparó la actitud del PP con la de Batasuna, ya que no condena el "escenario de agresión" que se dio en la marcha y "cuestiona el Estado de derecho" al afirmar que este caso es el mayor atentado contra la democracia, y que en España que se persigue a las personas por su ideología.

López Garrido aclaró, no obstante, que no pretendía poner a ambas formaciones al mismo nivel porque Batasuna es ilegal y el PP, el principal partido de la oposición. A pesar de que la sentencia asegura que el ministro no fue agredido, Garrido insistió en que quienes le insultaban y gritaban "no pretendían darle besitos" y que en estas situaciones de "violencia extrema" la policía "no necesita instrucciones".

ACUSACION "DELEZNABLE" La respuesta del PP no se hizo esperar. Eduardo Zaplana consideró "deleznable" e "injustificable" la comparación y la atribuyó al "nerviosismo e histeria" que, a su juicio, se ha instalado en el PSOE tras conocerse la sentencia. Zaplana volvió a solicitar la dimisión de José Antonio Alonso, anterior ministro del Interior, por mentir en el Parlamento cuando compareció para explicar las detenciones de los afiliados. Asimismo, retó a Zapatero a que tenga la "gallardía" de explicar en el Congreso un hecho de "tanta gravedad". El PP de Madrid, en un debate que se celebró en la Asamblea regional, sumó a estas peticiones la dimisión del ministro de Justicia, Juan Fernando López Aguilar, y del fiscal general del Estado, Cándido Conde-Pumpido. Desde el Gobierno se restó importancia a estas peticiones ya que, en palabras de Alonso, el principal partido de la oposición ha solicitado la destitución de varios miembros del Gobierno "decenas de veces".

NO HUBO INSTRUCCIONES Para el Ejecutivo, la sentencia rebate el argumento del PP de que los policías recibieron instrucciones para llevar a cabo las detenciones. "Ha dejado claro que el Gobierno ha dicho siempre la verdad y que el PP ha mentido siempre", sentenció Alonso. La vicepresidenta, María Teresa Fernández de la Vega, aseguró que presentarán un recurso ante el Tribunal Supremo.

En el Congreso también se reprodujo la trifulca política durante la comparecencia de Alonso para explicar sus planes en Defensa. Fernando López-Amor, diputado del PP, aprovechó para pedir responsabilidades al ministro por el caso Bono .