El PSOE tiene un nuevo lema: 'Ganarse el futuro'. El eslogan estará en vigor durante todo el 2013, en el que los socialistas encararán a partir de este sábado, durante la reunión del comité federal, su renovación política y orgánica. La frase supone una clara alusión a la necesidad de recuperar la confianza ciudadana tras el desgaste de la última legislatura de José Luis Rodríguez Zapatero.

"Hoy comienza una nueva etapa en la vida del Partido Socialista. Hoy es un día muy importante para nosotros porque vamos a tratar de salir al reencuentro con los ciudadanos para elaborar un nuevo proyecto político, una alternativa a las políticas que está desarrollando la derecha. Y lo vamos a hacer de una forma nueva en nuestro partido. No vamos a hacer una conferencia política al uso, sino que vamos a discutir un documento que vamos a elaborar a partir del diálogo con el conjunto de los ciudadanos. Es una forma nueva de hacer las cosas en nuestro partido. Vamos a tratar de llegar a un millón de ciudadanos que sienten como nosotros, que piensan como nosotros, que tienen las mismas ideas de justicia y de solidaridad que tenemos nosotros", ha dicho el secretario general, Alfredo Pérez Rubalcaba, poco antes del inicio del comité federal.

Reforma constitucional

Casi un año después de que asumiese el liderazgo del PSOE, la situación del partido no ha mejorado. Pese al creciente descontento con los recortes del Gobierno, los socialistas no logran remontar en las encuestas y su anunciada renovación (ideológica y orgánica) se ha venido aparcando sucesivamente debido, según la versión oficial, a los cinco comicios autonómicos del pasado año. Hoy, el comité federal, máximo órgano del PSOE después de los congresos, pondrá fecha y hora a ese tan necesario nuevo rumbo. De acuerdo con la cúpula del partido, será "el mayor proceso de renovación que ha hecho nunca un partido en este país".

El encuentro, al que asisten los dirigentes más importantes de todos los territorios, así como la ejecutiva en pleno, servirá para concretar estas iniciativas, tanto su tiempo como su contenido, que, junto a una nueva propuesta fiscal y la elección por parte de los simpatizantes del próximo candidato, incluye también la reforma constitucional para dar encaje a un Estado federal. Pero, más allá de todo este conjunto de trabajos, que se abordarán en cinco conferencias sectoriales que, a su vez, desembocarán en la conferencia política de octubre, también se colarán otros temas más espinosos. Las primarias, que un sector de los socialistas quiere adelantar frente a la intención del aparato de que se celebren entre junio del 2014 y mayo del 2015. El futuro de Rubalcaba, que él mismo sigue sin desvelar pese a que importantes dirigentes, como el andaluz José Antonio Griñán, le piden que lo aclare ya. El modelo de oposición, que no contenta a todos. Y el rumbo del PSC.

Marcha atrás de los socialistas catalanes

El malestar del PSOE con los socialistas catalanes ha disminuido después de que estos dieran un paso atrás en su propósito de abstenerse en todas las iniciativas relacionadas con la consulta soberanista que se voten en el Parlament. Pero ni mucho menos ha desaparecido. A pesar de sus profundas divergencias sobre el derecho a decidir, el primer secretario del PSC, Pere Navarro, cuenta con el apoyo de Rubalcaba, pero son muchos en el PSOE los que se lamentan cada día de que no se sienten para nada identificados con las posiciones de los socialistas catalanes. Algunos, incluso, sostienen que sería más fácil llegar a un acuerdo con el PP sobre el modelo territorial que con el partido que les representa en Catalunya.

Navarro acude a la reunión con una de cal y otra de arena. En primer lugar, expresará su gratitud ante la constatación de que la necesidad de una reforma constitucional en sentido federal haya ganado adeptos entre los barones del PSOE --federaciones de peso como Andalucía y Valencia preparan propuestas propias--, y que la dirección del partido transite por la única vía que creen que puede neutralizar la ofensiva independentista. Para los socialistas catalanes ya es un logro que Rubalcaba se avenga a incluir en la Carta Magna mecanismos que garanticen un modelo de financiación autonómica justo.

Derecho a decidir

Pero el PSC quiere aprovechar para que el PSOE abrace el derecho a decidir, a fin de posibilitar la convocatoria de una consulta en Catalunya con todas las de la ley. Sabedor de que topará con un no por respuesta, Navarro insistirá en que la posición del PSC será siempre la de rechazar sin titubeos la independencia, pero argüirá que el conflicto solo puede resolverse dando la voz a los catalanes, sin miedo. El líder del PSC apelará al "principio democrático" de adaptar la ley a la voluntad ciudadana, en sintonía con las tesis de juristas de la órbita socialista, como Francisco Rubio Llorente, expresidente del Consejo de Estado. Suya es la propuesta, que los socialistas catalanes ven con buenos ojos, de que el Parlament utilice su iniciativa legislativa para llevar al Congreso una proposición de ley para autorizar un referendo.