Nada mejor que una cena de desagravio para animar a la ministra de Fomento, Magdalena Alvarez, tras los sinsabores del caos ferroviario en Cataluña. Es lo que pensaron sus compañeros andaluces del Grupo Socialista en el Congreso que, junto a las diputadas encargadas de políticas de igualdad, decidieron que Alvarez se merecía un homenaje. Por andaluza, por mujer y por socialista. Fue el pasado lunes, en un restaurante noruego, cerca del Congreso, y asistieron unos 50 diputados, la mayoría paisanos.

El PSC decidió que estaría presente, pero de manera tan discreta como fuese posible. Los socialistas catalanes acordaron que, de sus 21 diputados, asistirían dos. Aunque en la cena no hubo discursos, la secretaria de política autonómica del PSOE, Carmen Hermosín, que además es diputada por Sevilla, explicó ayer que el acto fue organizado como respuesta a la "crítica despiadada" que han lanzado "tantos catalanes, de cualquier partido" contra la ministra. Hermosín también defendió el "rigor" de los trabajos de Fomento. Fuentes del PSC expresaron su malestar por estas declaraciones de Hermosín, que calificaron de "alucinantes".