El comienzo de las negociaciones para formar los órganos de dirección del Parlamento convirtió ayer al Congreso de los Diputados en un mercado persa, con sus regateos, faroles y propuestas de compraventa. Tal como estaba previsto, el PSOE abrió la ronda de contactos con CiU y el PNV. Los nacionalistas catalanes pidieron mantener, e incluso mejorar, sus cuotas actuales en la Mesa y las comisiones del Congreso y el Senado, pero sin comprometer su apoyo a la candidatura de José Bono para la presidencia de la Cámara baja. El negociador del PSOE y secretario de organización del partido, José Blanco, advirtió a CiU de que su demanda de puestos en el Congreso está condicionada a que voten a favor del exministro de Defensa.

Las conversaciones se desarrollaron en el despacho del portavoz socialista en el Congreso. Tanto los nacionalistas catalanes como los vascos expresaron a Blanco su poca simpatía hacia Bono por sus posiciones de abierta hostilidad hacia los nacionalismos. Sin embargo, el PNV, a diferencia de CiU, no se entretuvo en alardes de fuerza y dejó claro que votará por el político manchego siempre que sus peticiones se vean satisfechas.

DIFERENCIA Los nacionalistas catalanes estuvieron representados por Josep Antoni Duran, a quien se sumaron al final de la reunión Josep Sánchez-Llibre y Pere Macias. En declaraciones a la prensa tras el encuentro, Duran expresó confianza en que su petición será satisfecha, aunque añadió que existe una "diferencia no poco importante en torno a la votación de Bono". Explicó que, mientras que su formación pretende "reservarse" el apoyo al exministro, los socialistas consideran todo un mismo paquete.

En la pasada legislatura, el PSOE cedió a CiU una vicepresidencia en el Congreso y una secretaría en el Senado. Los nacionalistas catalanes también recibieron la presidencia de dos comisiones en la Cámara baja y una en la Cámara alta. Duran Lleida manifestó el deseo de conservar esos puestos o "algo más". El dirigente democristiano eludió precisar cuál será la posición definitiva de su federación sobre Bono, decisión que remitió a la reunión de la dirección de CiU prevista para el próximo lunes. El 3 de marzo pasado, Duran dijo que, cuando se negocia la Mesa del Congreso y "están en juego" una secretaría o una vicepresidencia, "toca aceptar los candidatos de los otros partidos".

La conversación de Blanco con Josu Erkoreka, del PNV, duró más de una hora y media. El portavoz vasco explicó que había pedido a Blanco sendas secretarías en las Mesas de ambas cámaras. Consideró que Bono "hace que el precio de los apoyos sea más caro", pero subrayó la disposición de su formación a apoyarlo, con el argumento de que es mejor tenerlo "acotado" en el Congreso que ejerciendo el poder desde el Ejecutivo. "A los animales mansos se les puede dejar en libertad, pero los cabestros deben estar acotados, en el redil", dijo Erkoreka en alusión a Bono.

EXIGENCIA AL PP Blanco, también en declaraciones a los medios de comunicación, dijo que el jueves exigirá a Eduardo Zaplana que el PP ceda a CiU o el PNV, al igual que pretende hacer el PSOE, uno de los cuatro puestos a los que tiene derecho en la Mesa. De oponerse los populares, los socialistas se verían en la tesitura de tener que asumir ellos esa concesión. Fuentes socialistas avanzaron que, en tal caso, el PSOE respondería bloqueando el acceso del PP a presidencias de comisiones.