El PSOE se ha desmarcado este viernes del anuncio del Gobierno, lanzado el día anterior, de que estudia incluir el castellano como lengua vehicular en las escuelas de Catalunya a través de la aplicación del artículo 155 de la Constitución. Los socialistas no han defendido el actual modelo de inmersión lingüística, e incluso han evitado cargar mucho las tintas al tratarse de una medida que todavía está en estudio, pero han dejado claro que el Ejecutivo corre el riesgo de extralimitarse. Según su secretaria de Igualdad, Carmen Calvo, la suspensión de la autonomía, una medida que contó con el apoyo del PSOE tras el referéndum sobre la independencia del pasado 1 de octubre, no se debe utilizar para alterar la “vida cotidiana, normal, habitual y tranquila” en Catalunya.

Según la exministra de Cultura, una iniciativa como la planteada por el Ejecutivo central solo podría tomarla un Govern en plenas facultades, de acuerdo con el Parlament. Calvo ha vuelto a insistir en la necesidad de que los independentistas se pongan de acuerdo sobre un candidato a la investidura. “Tienen que formar gobierno ya. Están jugando a un juego incomprensible”, ha dicho.

“La aplicación del 155 se hizo para reponer el orden estatutario y para que los ciudadanos de Catalunya no tuvieran que padecer la inmensidad de problemas creada por el independentismo”, ha concluido la secretaria de Igualdad del PSOE.