El PSOE y el PSC han aplazado este sábado la revisión de sus relaciones y han pactado crear un comité permanente de coordinación política, encargado de hacer un seguimiento del día a día y de la gestión política cotidiana para mejorar la cooperación entre ambos partidos en el ámbito orgánico y parlamentario.

Esta figura se ha aprobado por unanimidad en el Comité Federal del PSOE, donde finalmente no se ha estudiado la revisión del protocolo de relaciones, que había molestado a muchos "barones" del partido porque admitía la posibilidad de que los socialistas catalanes votaran diferente en el Congreso en asuntos de especial relevancia para Catalunya, según ha informado Efe.

Según han confirmado fuentes socialistas, con esta propuesta se da el visto bueno también al regreso a la dirección del grupo parlamentario de un representante del PSC, después de que el diputado José Zaragoza se viera forzado a abandonarla hace unos meses, cuando los socialistas catalanes rompieron la disciplina de voto para respaldar el derecho a decidir.

LIBERTAD DE VOTO

El Comité Federal del PSOE no ha cerrado este sábado el nuevo protocolo de relaciones, ante el rechazo que había despertado en varias federaciones socialistas la posibilidad de dejar que el PSC tuviera libertad de voto en el Congreso en temas catalanes, y se ha limitado a dar el visto bueno a una especie de comité de enlace entre los dos partidos y dentro del grupo parlamentario.

De acuerdo con las fuentes, con la decisión no se da libertad de voto al PSC en temas en los que haya discrepancias, como habían pedido los socialistas catalanes, sino que las diferencias se tratarán de resolver con diálogo acercando posturas. "No hay ni concesiones ni cesiones. Es un acuerdo entre dos partes, unos partidos que comparten un ideario y el fin de su acción política", han subrayado las fuentes.

SEGUIR JUNTOS

Al hilo de lo anterior, tanto el PSOE como el PSC se han comprometido a poner todo su empeño en "seguir juntos en esto" ante la difícil situación en Catalunya entre el "secesionismo" de CiU y ERC y el "inmovilismo". "Está en peligro la unidad de España", han recalcado, sin precisar qué ocurrirá si los diputados del PSC vuelven a romper la disciplina de voto, como el pasado mes de febrero, cuando fueron sancionados con 600 euros cada uno por respaldar el derecho a decidir.

Desde el PSC se ha recalcado que no van a renunciar a su autonomía y a lo aprobado en su último congreso, pero tampoco van a olvidar que pertenecen "a una misma familia política".