El PSOE aventajará al PP en número de municipios de más de 50.000 habitantes, en los que los socialistas tendrán 62 alcaldías, frente a las 47 de los conservadores. "En este tramo, seguiremos siendo la fuerza de mayor implantación", subrayó ayer el dirigente del PSOE Alvaro Cuesta, quien también expresó su satisfacción por el empate con el PP en número de grandes ciudades: Barcelona, Sevilla y Zaragoza tendrán alcalde socialista, y Madrid, Valencia y Málaga, del PP.

Menos de una semana después de las elecciones municipales, el PSOE e IU ultiman sus pactos bilaterales para gobernar en ayuntamientos. La dirección socialista defenderá sin complejos este entendimiento que facilita, según Cuesta, "abrir paso a mayorías de gobierno estables, que permitan cumplir los objetivos del partido sin traicionar ningún principio".

A la hora de tejer acuerdos, el PSOE e IU han desdeñado las advertencias del PP sobre los riesgos de las coaliciones "social-comunistas". El PSOE sólo ha puesto un límite: que los acuerdos municipales no se vinculen a la formación de gobiernos autonómicos.

La responsable de política municipal de IU, Inés Sabanés, y Cuesta cerrarán el lunes los flecos pendientes del pacto. También pondrán a punto una declaración conjunta de intenciones.

El partido socialista excluye cualquier pacto con el GIL y con las agrupaciones locales de carácter anticonstitucional. En varios casos, como el Ayuntamiento de Vitoria, el acuerdo se alcanzará con el PP. Cuesta, igual que su líder, José Luis Rodríguez Zapatero, descartó "totalmente" pactos con el PNV mientras siga con su proyecto soberanista.

Según fuentes socialistas, Zapatero ha autorizado la estrategia que persigue que el diputado general de Alava sea el socialista vasco Javier Rojo. El proyecto exige que el PSE no apoye al candidato del PP, pero incluye el riesgo de que la abstención socialista propicie que este órgano foral pase a manos del PNV.