Mariano Rajoy hizo ayer una precisión semántica para escenificar una cierta distancia ante el anuncio del apoyo de su partido a la protesta convocada por la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT) para el próximo sábado. El líder popular afirmó que su partido respalda la nueva manifestación de la entidad que preside Francisco José Alcaraz, pero afirma que la protesta es para exigir al Gobierno que De Juana cumpla íntegramente su condena de tres años por proferir amenazas en dos artículos de prensa.
El líder del PP aseguró en Poblet (Tarragona) que "nunca" se manifestará "contra ninguna decisión de los tribunales", aunque confirmó que habrá una representación de su partido en la protesta.
La solicitud de permiso de la AVT dice que la cita es "en protesta por la rebaja de la condena a De Juana" y ayer la entidad emitió un comunicado en el que acusa al Gobierno, a la fiscalía y a "medios afines" de la rebaja de pena "de 96 a 12 o 3 años". Pese a ello, el líder del PP consideró que la AVT solo busca evitar que Instituciones Penitenciarias aplique beneficios al etarra.
Derechos del preso Rajoy no aludió a que el recluso tiene derecho a ellos porque ha cumplido en prisión preventiva dos de los tres años de condena y el fallo del Supremo establece que las amenazas no son de carácter terrorista. Eludiendo esta precisión, Rajoy consideró que debe cumplir el resto de la pena porque "no se ha arrepentido, sigue siendo de ETA y no ha pedido perdón a las familias de las víctimas".
José Luis Rodríguez Zapatero reclamó al PP que respete la "autoridad" del Supremo. El presidente, desde Ibiza, no quiso pronunciarse sobre el anuncio de que el PP respaldará la marcha de la AVT, pero sí afirmó que le parece una falta de respeto a la justicia.
Zapatero destacó que la decisión procede del Supremo y que se ha tomado "conforme a las leyes" vigentes, motivos por los que consideró que es "obligación" de los demócratas acatar y respetar las sentencias judiciales. Zapatero exigió a los dirigentes del PP que colaboren para "fortalecer la autoridad y la confianza" en el Supremo.
