El PP no consiente la más mínima tibieza para afrontar lo que considera "el mayor desafío a la democracia desde 1978". Mariano Rajoy leyó ayer una declaración del comité ejecutivo del partido, que celebró una reunión extraordinaria y de urgencia, en la que conmina al Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero a que "no vacile" en emplear "dentro y fuera del País Vasco los numerosos instrumentos que la ley pone en sus manos para defender el orden constitucional y la soberanía nacional".

La declaración exige también que Zapatero rechace cualquier "negociación" con Juan José Ibarretxe y que "recurra inmediatamente su plan ante el Tribunal Constitucional". La dirección del PP considera "un error" que Zapatero reciba al lendakari en la Moncloa, pero dice que sería un error más grave que esa entrevista se produjera antes de que Rajoy se vea con el presidente.

"CERRAR EL PASO" Rajoy insistió en que el Gobierno "no debe negociar" con el lendakari porque "desafía la soberanía nacional y transgrede las leyes consciente y deliberadamente. No se trata de persuadirle, sino de cerrar el paso a una actuación desleal y anticonstitucional".

Para "cerrar el paso" a la propuesta soberanista vasca, el PP pide al Gobierno que "no vacile" en ejecutar hasta los instrumentos legales más severos. Fuentes de la dirección popular recordaron que el artículo 155 de la Constitución permite al Gobierno suspender la autonomía vasca si el lendakari persiste en ejecutar el plan Ibarretxe una vez que sea rechazado por el Parlamento nacional.

El secretario general de CiU, Josep Antoni Duran Lleida, se mostró ayer partidario de permitir que el plan Ibarretxe se tramite en el Congreso, lo que implica votar a favor de la toma en consideración de la proposición de ley del Parlamento vasco cuando llegue a la Cámara baja. "Todo aquello que se pueda debatir con las palabras no tiene por qué rechazarse", afirmó.

Duran precisó que CiU no ha decidido su postura sobre el fondo del proyecto vasco, pero que mantiene su modo de actuar, que pasa por "respetar de entrada lo que apoye el País Vasco a través de su Parlamento".

El grupo parlamentario de Izquierda Verde, formado por los tres diputados de IU y los dos de ICV dista mucho de tener una opinión unánime ante la tramitación del plan Ibarretxe . Mientras el coordinador general de IU, Gaspar LLamazares, anunció el domingo que su formación rechazará la propuesta, los catalanes de ICV descartan votar en contra y se inclinan por la abstención: "No significa por nada del mundo votar que sí", argumentó el vicepresidente de ICV, Jordi Guillot.