Mariano Rajoy estuvo ayer en la Cámara baja. Quería recoger su acta de diputado para una legislatura en la que volverá a ser el jefe de la oposición. Y después de tantos días evitando las cámaras y los micrófonos, no tuvo más remedio que responder, o simular que respondía, a las preguntas de los periodistas. "¿Se abstendrá en la investidura de José Luis Rodríguez Zapatero?", se le planteó. Pero no se logró ni un ni un no por parte de Rajoy, el mismo que, en plena campaña electoral, dijo que solicitaría al PSOE la abstención en caso de victoria. No obstante, apuntó que está dispuesto a recuperar los acuerdos con Zapatero, una vez que conozca sus intenciones de futuro, quiénes serán sus socios y siempre y cuando se avenga a renovar pasados pactos de Estado en materias como terrorismo, modelo territorial, sistema del bienestar y política exterior. "A ciegas nadie da un voto a favor ni en contra. Ni la propia abstención", avisó el líder del PP.

RENOVACION JUDICIAL A Rajoy se le demandó ayer que, además de hablar de la investidura, aclarase cuál será la posición de su partido en los próximos meses a la hora de renovar el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) y el Tribunal Constitucional (TC), tarea que resultó imposible en la anterior legislatura. "Total disposición", sentenció el dirigente popular, que señaló que ve con buenos ojos que los socialistas "cambien de criterio", dado que ahora se muestran partidarios de no integrar en esos órganos judiciales a todas las minorías parlamentarias. "Parece que ahora cambian de criterio y, si cambian, el PP está abierto, porque creo que es buena una negociación sobre ese tema", remató.

Rajoy añadió que, durante los próximos años quiere debatir, y mucho, de economía. De lo que parece no querer hablar, al menos de momento, es de la situación del PP. Y no será porque la prensa no lo intente. Al reiterado "¿habrá renovación?", contestó con un "lo sabrán en su momento". O sea, el lunes, en la junta directiva del partido.

MAYOR REAPARECE Ayer entró en la escena política el exministro del Interior y portavoz del PP en el Parlamento Europeo, Jaime Mayor Oreja. Y lo hizo para lanzar un vaticinio: que el presidente José Luis Rodríguez Zapatero retomará la negociación "con el Movimiento de Liberación Nacional Vasco", solo que, esta vez, sustituirá a ETA por el PNV, según matizó. Además, calificó al líder socialista de "radical".