José Luis Rodríguez Zapatero no cantará hoy la Internacional en la fiesta minera de Rodiezmo (León). El presidente, que en 24 días afrontará su primera huelga general --prevista para el próximo 29 de septiembre--, decidió suspender este año su tradicional visita al encuentro organizado por la UGT, al que siempre había acudido desde que llegó a la Moncloa en el 2004.

El presidente del PP, Mariano Rajoy, aprovechó ayer el acto de apertura del curso político en Soutomaior (Pontevedra), para hurgar en la herida e ironizó sobre la gran ausencia de Zapatero, cuya participación en el acto siempre había sido calificada de "demagógica" por los populares. "Después de tanta propaganda en Rodiezmo, ¿ahora qué?", se preguntó el líder del PP. Rajoy sostuvo que "la imagen de la silla vacía de Zapatero" en Rodiezmo por primera vez desde que fue investido presidente será "la plasmación gráfica del engaño a todos los españoles" sobre la situación de la economía nacional. Y espetó: "Si yo estuviera en su lugar hubiera ido y explicado la gestión económica del Ejecutivo. Eso debe hacer un buen gobernante".

En la fiesta no estará tampoco la secretaria de organización del PSOE, Leire Pajín, ni ningún ministro. Pero sí que participará el exvicepresidente y ahora diputado socialista, Alfonso Guerra, un clásico de la celebración minera. Guerra es uno de los históricos dirigentes que ha dado su apoyo a Tomás Gómez en las primarias de Madrid.

Como si estuvieran coordinados, el secretario general del PSM presentará a la misma hora su candidatura para encabezar la lista en las elecciones del 2011 en la Casa del Pueblo de la UGT de Madrid, cuya fachada está cubierta por una pancarta a favor de la huelga. Ante lo que parece un desafío a Zapatero, Gómez insistió ayer en negar que esté "enfrentado" al presidente. "Los sindicatos son nuestra gente", dijo.