El Gobierno y el PSOE se culparon el uno al otro de incomunicación en torno al ´Prestige´. Mientras el líder socialista, José Luis Rodríguez Zapatero, se quejaba de no haber recibido "ni una sola llamada" del Ejecutivo para informarle de lo sucedido, el vicepresidente primero, Mariano Rajoy, se lamentaba de no haber recibido llamada alguna desde el PSOE en los 18 días que dura la crisis. Además, los socialistas gallegos presentaron ayer la moción de censura contra Fraga.
