La matanza del 11-M cogió desprevenido al Gobierno del PP. Por eso la prioridad del Ejecutivo socialista ha sido el rearme ante la amenaza del terrorismo islamista, hasta el punto de multiplicar por seis el número de policías que lo combaten. De los 135 consejos de la comisión parlamentaria que investigó el 11-M, sólo uno ha quedado en el tintero: el pacto contra el terrorismo internacional.