El fiscal rebajó ayer la pena a 15 presuntos colaboradores de ETA y retiró la acusación a otros cuatro imputados, después de que la Guardia Civil certificase en el juicio que en los papeles incautados a Ibon Fernández, Susper , arrestado en Francia en el 2003, solo apareciera el nombre de tres.

El fiscal Jesús Alonso acusó de colaboración en lugar de pertenencia a Amaia Urizar, novia de Garikoitz Aspiazu, Txeroki , supuesto jefe militar de ETA. El cambio afectó a otras tres personas. Las cuatro se enfrentaban a nueve años de cárcel y ayer el fiscal les reclamó cinco. Por ello, podrán quedar en libertad al haber cumplido la mitad de la pena si recurren ante el Supremo.

Para los otros 11 acusados, el fiscal pidió entre dos años y siete meses y dos años de cárcel. Seis de ellos fueron acusados de tentativa de colaboración y los otros de conspiración para colaboración.