La carrera ha empezado. Las grandes empresas españolas que se preparan para invertir en Argelia recibieron el aplauso del Rey. En la clausura del foro empresarial hispanoargelino, Juan Carlos les animó a avanzar y profundizar en ese objetivo.
Como recordó ayer el Rey ante unos 200 empresarios de las dos orillas, Argelia ha activado "un amplio plan de privatizaciones", y hay mucho campo para actuar. Desde ferrocarriles hasta plantas desalinizadoras, transporte urbano o la construcción de puertos y aeropuertos.
La última visita de Estado de los Reyes fue hace 24 años, cuando la situación política y social no permitía el aprovechamiento eficaz de sus recursos naturales. Ahora, la economía argelina avanza con celeridad y las garantías jurídicas para la repatriación de beneficios están atadas.
SALTO ADELANTE Argelia puede dar un paso de gigante en diez años. Las sombras las proyectan el crecimiento del islamismo radical y la aproximación estratégica de Al Qaeda a la franja sur del Sáhara. En cuanto al problema del pueblo saharaui, Buteflika no ha modificado su postura, aunque mantiene ese contencioso al margen de la relación económica con España.
La privatización de la banca ya ha comenzado. El Santander está entre los pretendientes seleccionados, junto a bancos franceses y el grupo City Bank. Gas Natural, Repsol y Abengoa, entre otras, aumentarán notablemente su actividad en Argelia.
Algunas licitaciones serán restringidas en beneficio de España, según fuentes comerciales. La negociación sobre el aumento del precio del gas que compra España no puede ser un hecho aislado, señaló el ministro de Industria, Joan Clos. A su juicio, el pacto entre Gas Natural y Sonatrach se cerrará con un incremento bastante inferior al 20%. Salvador Gabarró, presidente de Gas Natural, señaló que "no es adecuado hablar durante una visita de los Reyes".
